El proyecto anónimo Álauda ha logrado captar la atención de la blogosfera sin revelar apenas información sobre su misma esencia, apostando por una concepción de trabajo marcadamente DIY y presentando dos temas en la red que, poco a poco, van calando hasta erigirse en una de las revelaciones de esta recta final de 2013. ¿Dónde estará dentro de un año? El tiempo dirá, por ahora toca disfrutar de sus primeras dos joyas con la ligera sospecha de que si está aquí es para quedarse.
- Álauda presentaba hace apenas unos días su segunda propuesta en Soundcloud, Cyan water
- El proyecto mantiene su anonimato y se perfila como una de las sorpresas más gratas del año que se acaba
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¿Quien demonios es Álauda? En estos tiempos nuestros en los que cualquier usuario puede conocer al dedillo la biografía de su nuevo grupo favorito resulta casi un milagro que un proyecto musical como el que aquí nos ocupa sea capaz de retener el misterio y mantener el anonimato después de la publicación de sus primeros temas en la red. No es la primera formación que lo intenta pero si que parece que será una de las que siga este peculiar mecanismo de trabajo de manera más fiable, habiendo firmado hasta la fecha algunas publicaciones de notable nivel en la red, llamando la atención de paso de diferentes blogs y medios musicales en la red en distintas partes del globo.
Falling Star -hemos dejado su vídeo de debut al inicio- fue el primer track con el que llamó la atención y en fechas recientes no llegaba su segunda aproximación musical, la estupenda Cyan water recién presentada, otra maravilla que confirma la enjundia del proyecto y que la señala como una de las revelaciones más amables en este final de curso de publicaciones mediáticas y mastodónicas.
Lo marítimo, una constante para Álauda
Así que lo de Álauda se ha convertido un misterio, descubierto en parte por el website Dummy -quien definió el anonimato del proyecto como el hallazgo del mensaje en una botella, definición que suscribimos desde aquí-, ampliándose el milagro con la submarina Cyan water, tema sedoso y envolvente que nos mece con suaves cantos de sírena electrónica y que logra, qué rayos, que no nos importe que todo se quede en el anonimato.
¿Hasta donde llegará la apuesta por el misterio de Álauda? Disfrutemos del milagro con la escucha de Cyan water, su última propuesta: