El pasado viernes Enric Montefusco daba continuidad a su celebrada primera aproximación en solitario, aquel MERIDIANA (Buena Suerte, 2016) con el que dejaba atrás el legado de Standstill para abrir una nueva etapa en solitario, ampliada ahora con el EP COROS DE MEDIANOCHE (Buena Suerte, 2018). En él, Montefusco apuesta por seguir explorando los mecanismos de la canción popular, y lo hace rodeado de cinco autores de quienes admira su manera de entender y vivir la música como son Niño de Elche, Albert Pla, Maria Arnal, Nacho Vegas y Hermanos Cubero. Con todos ellos explora y amplía su afinidad «ética y estética», completando con ellos un viaje interior en el que las diferentes colaboraciones planteadas han ido más allá de la mera sesión de estudio, planteando un intenso ejercicio de estilo con el que difuminan los límites mismos de la autoría, «un nuevo paradigma de comunicación horizontal que supere los viejos clichés del rock».

.En este atrevido ejercicio de estilo, Montefusco «cede el primer plano a sus colaboradores» para desdibujar abiertamente «la idea de autoría, sin renunciar al estilo», y proyecto «la transmisión de unos valores que están por encima del compositor». Todo ello para seguir explorando ese viaje interior a la canción popular que arrancó en su anterior propuesta, aquel Meridiana al que arropa ahora casi un díptico, si tomamos en consideración la publicación de CARNE DE CAÑÓN (Bandaàparte, 2018), trabajo en el que se compilan todas sus letras y textos escritos en castellano, acompañado de relatos inéditos de tinte autobiográfico.

Charlamos con el autor para indagar más sobre el proceso creativo de uno de los lanzamientos más interesantes de este final de semestre.

Coros de Medianoche se presentará en exclusiva el próximo 25 de julio, en el Teatre Grec de Barcelona.

TEXTO: R. IZQUIERDO | Fotografía de portada cedida por SONY MUSIC SPAIN

Vuelves con un trabajo en parte colaborativo, cinco canciones trabajadas a la par con otros tantos artistas. ¿De dónde surge la idea de llevar a cabo este disco casi cooperativo?

Surge del ejercicio que hago siempre entre cada lanzamiento. Proyectos que me estimulen y me oxigen, y que me pongan en contacto con otras disciplinas. En otras ocasiones he realizado cosas de teatro, más conceptuales, pero ahorame apetecía hacer un proyecto musical que tirase del hilo de Meridiana, mi anterior trabajo: seguir redescubriendo la música popular. Quería redefinir o cuestionar la figura misma de la autoría de cada canción, hacer algo que reivindicase la importancia de las canciones y de sus valores, por encima del autor

¿Es un ejercicio que requiere humildad? Dispersas tu firma como autor…

Que la autoría quede dispersa es algo que buscábamos un poco todos. El EP es un ejercicio de trabajar eso, y de trabarlo con artistas que me gustan y que encajan en con como veo yo el mundo

No sé si tiene que ver con el hecho de que en tu anterior trabajo te expusiste mucho: todo el proyecto recaía sobre tu propio nombre.

Sinceramente, creo que no. Tiene más que ver con la profundización de las posibilidades que te da la música popular, buscar su significado último. En el siguiente disco volveré a estar en primer plano, si bien es verdad que cada vez que tengo menos necesidad de estar delante, no es algo que me llame. He ido tomando más conciencia de que lo importante son las ideas y los valores que hay detrás de las canciones. Este EP es sobre todo un ejercicio de eso.

¿Costó ajustar cada canción a cada autor? ¿Cómo trabajasteis esa comunión de estilos?

Más allá de que parte de la gracia era que yo no cantase, lo que buscamos también era el trabajar juntos las canciones. Con cada colaborador hemos hecho la letra juntos,  sin definir del todo hasta donde llegaba la incidencia de cada uno. De esa manera, literalmente, el autor no se sabe quien es, y todo queda diluido. Desdibujar era un ejercicio interesante y enriquecedor, y buscar los puntos en común para definir cada canción ha sido una propuesta que nos ha aportada a todos.

Supongo que eso también marcó el ritmo de la grabación

Se dio en poco tiempo, ajustándonos a la agenda de cada uno. El trabajo con cada uno de ellos se dio en paralelo, y en un plazo relativamente corto pudimos grabar. Primero nos juntamos para ensayar y luego posteriormente entramos ya en el estudio, según su disponibilidad y sus agendas.

Uno de los puntos que más llama la atención es la portada del álbum y el diseño gráfico del disco. La atmósfera del disco casi casa con todo ese imaginario de Goya…

El diseño y el concepto están cogidos literalmente de un cuadro de Goya. El sonido no sé si es muy próximo, o al menos no se ha dado de una manera intencionada, pero si el cuadro me gusta seguramente sea por el mismo motivo por el que hago este tipo de música. El tipo de música que hemos investigado aquí es popular y a la vez oscura, así que supongo que no es casualidad que me guste ese cuadro, o que me guste Goya. Al final todo casa solo.

A la izquierda, ‘La Romería de San Isidro’. A la derecha, portada de ‘Coros de Medianoche’

Lo decía sobre todo porque en algunas canciones sí se da ese tono inquietante, un poco en la línea de las Pinturas Negras

En mis canciones siempre se ha dado un cierto componente oscuro o de misterio, lo que puede generar en canciones inquietantes. Son sensaciones que me gusta aplicar.

Antes hablabas de un cierto talante multidisciplinar en tu obra, y el EP casi coincide en el tiempo con la salida de tu primer disco. ¿Forma parte del mismo universo?

En mi caso creo que sí. Para mi tiene el mismo valor un disco como Meridiana como un espéctaculo como Tata Mala, que presentamos en el Grec hace un par de años. Son medios expresivos al servicio de unas necesidades vitales, y al servicio de unos valores que necesito exponer y plantear. Creo que vale la pena defenderlos, y a veces son complementarios. Se da en la canción, donde se funden música y letra, y a veces se defienden por sí solos, como lo he intentado hacer yo con este libro. Esa es la gracia: buscar y encontrar las infinitas posibilidades que tenemos a nuestro alcance para expresarnos.

Enric Montefusco, en una imagen promocional para Coros de Medianoche | Sony Music Spain

Volviendo a Coros de Medianoche, no sé si tuviste clara la elección de autores para acompañarte en este viaje desde el principio.

Sí, porque todos ellos se han aproximado a la música popular tal y como me interesa. Lo han hecho además con cierto compromiso político y de contenido, algo que me interesa casi al mismo nivel que el artístico. Quería que estuviesen en el EP, y no es casualidad que estén ellos y no otros.

¿Qué puedes contarme del directo? ¿Se plantea como una sesión única?

Haremos una presentación especial en el Grec, el próximo 25 de julio. Va a ser un concierto único y exclusivo, así que será el día en el que nos encontremos todos, y aprovecharemos para hacer un repertorio nuevo  y diferente, con el que seguir ahondando con la idea de canciones e intérpretes, algo que nos da muchas posibilidades. Ahora justo estoy trabajando en esas posibilidades

El hecho de que sea un disco casi conceptual, y que tenga una única representación en directo, ¿te hace sentir que vas a contracorriente?

Realmente, no lo sé. No lo puedo valorar, y tampoco entro en estos términos. Me suele pasar que para hacer discos o espéctaculos busco la coherencia interna, que encaje con el momento concreto que estoy pasando en mi vida, y que forme parte de un todo. Me cuesta no hacerlo de esta manera, y a veces me jugará a favor y otras en contra. De todas formas quiero pensar que es algo que se retroalimenta, y que si escuchas las cinco canciones de este EP juntas suman más que si lo haces por separado. Me gusta pensar que es una recompensa para el que haga el ejercicio, cada vez más raro, de escuchar un disco completo, en el orden que plantea el autor.

Quería preguntarte también sobre Meridiana, un disco improtante por muchos motivos, sobre todo por ser el primero después de Standstill.

A nivel personal fue un ejercicio muy liberador, un balón de oxígeno. Después de compartir un proyecto tan intenso como Standstill durante 20 años la mochila era muy grande, y empezar de cero fue sobre todo liberador. Me lo he pasado muy bien en la gira, me he reído mucho con mis nuevos compañeros, y he cogido la furgoneta con mucha ilusión… En ese sentido ha sido una experiencia inmejorable.

¿Y a nivel artístico?

Un paso más dentro de todos los saltos que he ido dando. Lo viví como un disco más, con compañeros diferentes, y planteado con un poco más de libertad. Pero las sensaciones a nivel artístico han sido similares: acabé igual de contento que en los otros discos. A nivel de repercusión seguramente se ha sumado gente nueva, del mismo modo que habré perdido a otra, pero eso es algo que ha pasado en todos los discos.

Enric Montefusco: una inmersión en la música popular | Sony Music Spain

Sobre ese cambio de público, supongo que es algo que también se dará

Este disco ha sido un paso más allá a la hora de abrir el espectro de gente que se acercaba. Era algo que me interesaba: distanciarme de los reductos y buscar gente con otros intereses. Entiendo el mundo así, y entiendo mi lugar en el mundo así. Hacerlo así me permite conectar con gente que no tiene nada que ver con los lugares de los que procedo, y me abre nuevos horizontes que me apetece mucho explorar.

Es un ejercicio un tanto similar al que hizo Maria Rodés con la copla, por ejemplo.

Al final, cada persona sigue su propio camino, y los artistas también, claro. Ese camino se comparte a veces con unos, a veces con otros, pero no es algo que no me preocupe mucho. Lo que me preocupa es llegar de la mejor manera posible a la gente, y sobre todo hacerlo de una manera honesta.

Ya para acabar, me gustaría preguntarte por ti aproximación a la canción popular

Pues he llegado de una manera absolutamente espontánea. A mi me dicen hace diez años que me acabaría sumergiendo en la canción popular y no me lo hubiese creído: se escapaba absolutamente de mis intereses y de mi comprensión. Al empezar en un sitio concreto, con un tipo de música pensada solo para acólitos, partes de un terrerno muy endogámico, pero me he ido abriendo poco a poco, y me he acabado encontrando con que lo que necesito y lo que se me da bien, que es el conectar entre lo que me pasa y me duele a mi, con lo que le pasa y le duele a cualquier persona. Mi trabajo es conectar eso de la mejor manera posibile, y eso es como yo entiendo que debe ser la canción popular bien entendida.

Escucha Coros de Medianoche de Enric Montefusco en Spotify: