Tras la previa de la jornada del Jueves, el Faraday 2012 arrancó a lo grande el pasado día 29, con Bowerbirds y Herman Dune como reclamos internacionales y Ainara LeGardon y Love of Lesbian copando parte del interés a nivel estatal. Jornada intensa en suma que repasamos a continuación, con crónicas de NORMA SOLANO y RUBÉN IZQUIERDO

El Faraday siguió fiel a su cita con el inicio del verano llenando de buena música el Molí de Mar de Vilanova i la Geltrú. De nuevo con éxito de público -y con Love of Lesbian protagonizando el concierto más multitudinario de la jornada- y con la habitual capacidad del festival para alternar grandes nombres internacionales con bandas de indudable interés estatal el Festival arrancó a las seis de la tarde con Gran Amant.

La formación balear Gran Amant, de la que hablamos en su momento dentro de nuestra sección Bandcamp, y que sirvió para empezar a dar lustre al Festival. Los baleares presentaron El Primer Disc y salieron airosos en el difícil reto de abrir el ciclo de conciertos en el Far, con el aforo aún por llenar, en una hora por otra parte que desde aquí adoramos, con el sol tiñiendo de luz el espacio vital del Faraday. Ya hablamos en su momento de las bondades de un disco que desde aquí recomendamos con entusiasmo, y que no hace otra cosa que resaltar el gran momento de forma de la escena balear. La banda acabó su concierto con la entusiasta Freddy Krueger y con el batería Pep Toni Ferrer, visto también en Oliva Trencada, finalizando la actuación entre el público. Tras ellos, Mates Mates saltaron a escena para presentar su nuevo trabajo, editado por Famèlic Records.

Mates Mates, en un momento de su actuación

Los de Vic vieron como, mientras tocaban, se iba llenando progresivamente el escenario principal del Faraday, el escenario Estrella, en el que se desarrollaron la mayoría de los conciertos. El quinteto no decepcionó y dio la bienvenida a todos con sus melodías frescas y soleadas. Exponiendo gran parte de los temas de su álbum Vida Animal (Famèlic, 2012). La joven formación llenó su setlist de sonidos pop, melodías vocales, sonidos eléctricos y de trompeta, y admitieron que la brisa marina era la mejor aliada para dar el pistoletazo de salida a un festival de la forma más optimista. Tal y como ellos mismos comentaron en una de sus canciones, «ens hem flipat una mica, però ara ens tranquil·litzarem i després ens tornarem a flipar«, remarcando su capacidad para rematar un directo que supo jugar a dos velocidades -también a dos idiomas, con la presencia siempre agradecida de sus temas en italiano- que nos dejó un grato sabor de boca y con ganas de más.

Ainara LeGardon, pletórica en el Faraday // R. Izquierdo

Manteníamos un grato recuerdo de Ainara LeGardon desde su explosivo concierto en el Primavera Sound 2011, donde tocó bajo un sol de justicia a las cinco de la tarde, así que esperábamos con muchas ganas su regreso en directo. La banda desplegó su fortaleza habitual –We Once Wished es un disco que invita a ello- y lo hizo exhibiendo músculo y el habitual aplomo de la formación. Ainara LeGardon, que hicieron doblete después de su paso un día antes por el Festival, tiraron de repertorio y contundencia, haciendo predominar su habitual sonido guitarrero, pilares con los que han construido un repertorio de monolítica solvencia rock corregida y aumentada en sus directos, dotados siempre de gran intensidad.

Joaquín Pascual y Ainara LeGardon precedieron a los dos grandes nombres internacionales de la noche, entre los que brilló con especial intensidad el renacido folk de Bowerbirds

Joaquín Pascual, o la otra mitad de Surfin’Bichos junto a Fernando Alfaro y posteriormente líder de Mercromina y Travolta, fue el maestro de ceremonias perfecto para la caída del sol. Con su segunda propuesta en solitario, La Frontera (Grabaciones en el Mar, 2012) el de Albacete se acerca mucho más al terreno oscuro, y sus sonidos electrónicos, los efectos de ruidos de cadenas y su voz grave  que entregó con cuentagotas nos introdujeron de forma mágica y algo embriagadora en la noche del viernes.  Con un predominio innegable de la instrumentación y con temas susurrados como Un ritmo caliente, este veterano del indie estatal sedujo de forma elegante y serena al público, y se lo llevó con él cual brujo hacia la oscuridad

Bowerbirds  arribaron al Festival como esperadísimos cabezas de cartel de la noche, con permiso de los más mediáticos Herman Dune y Love of Lesbian, y felizmente de gira después de los problemas de salud en el pasado de su componente femenina, una Beth Tacular aquejada de una grave enfermedad en 2009, un punto de inflexión en la banda que dio como resultado la aparición de The Clearing, el disco que presentaron en directo ante un escenario principal a rebosar, en un concierto que quizá sorprendió a los más enamorados de sus dos primeros discos, pero que acabó de completar una noche redonda con la presentación de los nuevos temas, a pesar de realizarlos con una instrumentalización diferente a la del disco.

Bowerbirds, la propuesta más folkie de la jornada // R. Izquierdo

The Clearing es, ya lo avanzamos en su salida al mercado, el volver a empezar de Bowerbirds, disco con el que probaron nuevos sonidos gracias al uso de sintetizadores. El trío dio un protagonismo menor a la guitarra que en sus anteriores discos, aunque mantuvo la suavidad de su sonido folk intacto aún con el mayor peso escénico de los sintetizadores, que insufló a la banda un nuevo aire ensoñador, elevada a la máxima potencia con temas como Tuck the darkness in. Y aunque los cambios sorprendan a los que se engancharon a los de Carolina del Norte en el momento más álgido de su instrumentalización folk, los resultados del disco y su traslado al directo convencen hasta el punto de convertirse en los triunfadores de la jornada por méritos propios.

Teclados // R. Izquierdo


Tras ellos, llegó el turno de Herman Dune. El dúo francés optó por volver a su esencia y despojarse de la imagen de banda creadora de hypes que obtuvieron el año pasado con el tema que acompañaba al anuncio de cerveza con El Bulli y la Costa Brava de fondo. David-Ivar Heman Dune y Néman Herman Dune se presentaron en el escenario con lo puesto: una guitarra y una batería, y ofrecieron un recital con toques más folk que el pop fácil con el que los identifica el gran público, una decisión arriesga, que contó con el handicap añadido de actuar después de Bowerbirds y de hacerlo además como cabezas de cartel.

Expusieron la calidad por la que luchan en un completo recital en el que los tintes country-folk y las canciones de melancolía alegre tuvieron un innegable papel protagonista. Sin I wish that I could see you soon, a los franceses les costó conectar del todo con la audiencia, descolocados quizá por la ausencia de buena parte de los temás más reconocibles de sus discos anteriores, con un repertorio demasiado fijado en Stronge Moosic.

Herman Dune y Love of Lesbian, que centró su concierto en los temas del nuevo disco, obviaron sus hits icónicos para centrarse en los temas de sus últimos trabajos discográficos

Cumplido el paso de los dos cabezas de cartel de la noche, Ginferno hizo las veces de visagra entre los grandes nombres internacionales y el gran reclamo estatal de la jornada, con un concierto dinámico y eléctrico que cumplió las expectativas. Mondo Totale les confirmó como, citando la reseña que llevaron a cabo desde el País, «una institución del Madrid subterráneo«. Con esa voluntad guerrera se plantaron en el escenario Tic Tac, ofreciendo un concierto vitamínico en el que mantuvieron intacto su espítitu original, con guiños post-punk y las bocanadas morriconianas ya apuntadas en el programa, desplegadas con plena vigencia.

Love of Lesbian llegaron al Faraday a todo gas y no defraudaron. La banda de Santi Balmes anunció de inicio que no incluirían en su repertorio su Club de fans de John Boy y centró buena parte del concierto en los temas de La Noche Eterna. Los Días No Vividos. Ante un escenario a rebosar, Love of Lesbian se explayaron en los nuevos temas del disco, uno de los más esperados de la temporada, que le está llevando a protagonizar una intensa gira de conciertos a lo largo de toda la geografía peninsular.

La guitarra, protagonista esencial del Faraday // R. Izquierdo

El colofón de la jornada lo pusieron Fasenuova y Nu Niles, un buen punto y final para esta primera jornada en el Molí de  Mar, que nos dejó el sólido directo de Ainara LeGardon y el feliz regreso de Bowerbirds dos momentos para el recuerdo.