Los Graves son un trío proveniente de Pamplona, localidad de la que últimamente salen bandas muy interesantes con puntos en común: un sonido con mucha personalidad y su amor el rock´n´roll. Inspirados en el garage, el rockabilly sixties y el reverb, crean melodías trabajadas y personales que rememoran al rock en su acepción más amplia e histórica. Hablamos con Ruperto Mendiry (voz y guitarra) sobre su último disco y su experiencia como banda, completada por Iñigo Ocáriz (bajo) y Pablo Gimeno (batería).
Entrevista: CARLOS TORRES | Fotografía: LOS GRAVES
Vemos por vuestro dossier que los orígenes de la banda se remontan al cambio de formación que tuvisteis en 2013. ¿cómo fue el proceso?
Pet: Aunque tuve un grupo con 15 años nunca llegué a tocar en directo. Sin embargo, he hecho canciones siempre. En 2013 coincidió que Dani Ulecia, productor de “Supernova”, me invitó a grabar dos canciones que después se incluyeron en el libro-disco “Benditos Críticos”, de Laura Baleztena y Mikel Belascoain. Fueron “Mirror in love” y “Heat”, que también están en “Supernova”, con versiones algo diferentes. Yo ya andaba tocando con Guillermo Sarmiento, primer batería del grupo. Después, entraron Gipo y Cristina y así se crea la primera formación de Los Graves. Un año después, lo dejó Guille y entró Pablo.
Quería preguntaros por la salida de Cristina de El Columpio Asesino. ¿Os condicionó mucho a la hora de seguir adelante
Pet: En realidad no. Sabíamos que la presencia de Cristina tenía caducidad. Entró en Los Graves porque El Columpio Asesino estaba en el impasse entre disco y disco, y también nos dijo desde el principio que ella estaría el tiempo que pudiese. Es cierto que al principio hubo cierta incertidumbre. Guille se fue con Cristina y el cuarteto se quedaba en dúo. En unos meses movimos hilos y, a través de nuestro actual manager, Iñigo Sola, dimos con Pablo. En seguida empastamos y vimos que era posible la continuación de la banda como trío.
¿Tenéis experiencia de haber tocado en bandas anteriores? ¿Cuál es vuestro «pedigrí”?
Pet: Mi experiencia previa se reduce a dos bandas, con las que no llegué a tocar en directo: The Be Bop Company y en la primera formación de The Glitter Souls. Gipo tocó en Supermiriafioris y después en Super Big Mama. Pablo tocó con El gusto es mío y varias bandas locales.
La salida de Cristina no nos condicionó: sabíamos desde el principio que tenía fecha de caducidad
Volviendo a los orígenes, ¿creéis que la banda ha cambiado mucho con respecto a cuando empezasteis? ¿En qué creéis que habéis crecido más desde entonces?
Pet: Empezamos casi como una banda de folk-rock, con algunos toques surferos. Yo tocaba la guitarra acústica y jugábamos con las armonías vocales y con las canciones dialogadas chico-chica al estilo de Gainsbourg y Birkin, Lee Hazlewood y Nancy Sinatra o The Limiñanas. Convertirnos en trío, a mí me obligaba a hacer el salto dylanita hacia el eléctrico. Ahora el sonido es más garage, más surf, más punk, más psicodélico, más atmosférico y rotundo. Nos gustaría pensar que en nuestros conciertos hay cierta vocación de experiencia artística con momentos de auténtico clímax ruidista.
Vuestro disco «Supernova» fue grabado en los estudios Color Hits con el gran Daniel Ulecia. ¿Cómo fue el proceso? ¿Qué ha aportado él a la grabación?
Pet: Fue un proceso agotador. Grabamos once canciones en menos de tres días. Agotador, pero bastante fluido, en general, ya que la base instrumental la grabamos en directo. En ese sentido, el sello de Dani es inconfundible y el sonido prístino. Las panelaciones, el mimo en la justa presencia de cada instrumento y voces… Creo que su mano no se nota tanto en el proceso de grabación como en el de la producción. Para él fue un proceso largo de edición: producción y masterización, y para nosotros una excelente carta de presentación. “Mondo Sonoro”, en su edición del norte, lo clasificó como tercer mejor lanzamiento de 2015.
El modelo de autoedición es algo que admiramos mucho y nos gustaría conocer vuestra experiencia, si fue algo premeditado o si ha surgido como algo espontáneo. Cómo veis el panorama actual en cuanto a apoyos y sellos?
Pet: No. No fue ni espontáneo ni premeditado. Lo enviamos a todos los sellos imaginables. Tampoco encontramos ningún halo romántico en el hecho de tener que autoeditar. Ojalá hubiese más implicación por parte de los sellos. O más ayudas públicas a la creación. Entiendo que en la situación actual acojone apostar por un grupo que sale de la nada. Esperamos que con el siguiente, encontremos el apoyo que no logramos con “Supernova”.
¿Tenéis pensado editar el disco o futuras publicaciones en vinilo? ¿Qué opinión tenéis de este formato?
Pet: Gipo y yo, por edad, hemos crecido con vinilos. Recuerdo escuchar un disco 15 veces en la tienda antes de comprármelo. Es por tanto, el soporte con el que cimentamos esta locura por el rock’n’roll. Además de esta cuestión romántica, está ese sonido cálido y aterciopelado que, al menos hasta ahora, no ha logrado el mundo digital.
Hablemos de vuestro sonido. Vuestra música me remite al rock fronterizo de inspiración sesentera así como al garage, la psicodelia, el surf y el power-pop. Me vienen a la mente bandas como Clint o Salvaje Montoya, por buscar un guiño. ¿Cómo es el trabajo compositivo de la banda?
Pet: Ese sonido es pura honestidad. La multitud de influencias son el producto de nuestro bagaje y cultura musical, pero hay nada premeditado. El sonido ha seguido una evolución natural en el que caben influencias desde The Stooges, The Sadies, The Jacobites, The Allah-Las, The Limiñanas, La Velvet, Leonard Cohen o Sonic Youth. Respecto a las composiciones, parten, en la mayoría de los casos de temas que compongo solo en casa. Normalmente las grabo y las mando al grupo para llevarlas al local de ensayo. Algunas llegan más esqueleto y otras más cerradas. En el disco hay canciones con más de 15 años, como “Mirror in love”
El otro día preguntábamos a Tremenda Trementina y Exnovios sobre la supuesta escena que a día de hoy se mueve en Pamplona con respecto a bandas y directos. ¿Cómo lo veis vosotros bajo vuestro punto de vista?
Pet: Creo que la escena de Pamplona vive un excelente momento. Al menos a un nivel underground. Exnovios, Tremenda Trementina, Germán Carrascosa, Los Plastones, Juárez, Cabezafuego…
¿Veis más fácil ahora daros a conocer que hace años?
Pet: Yo creo que si el producto es bueno, al final aflora. Antes, ahora y siempre.
Giráis mucho por el norte y tenéis bastante calado allí (Mondosonoro os nombró tercera mejor publicación de Euskalherria/Rioja del año pasado). El colofón creo que habría sido el concierto con los Fuzztones en Vitoria el pasado Mayo y fue una pena que se cancelase, pienso que habría sido un espaldarazo perfecto para daros más proyección. Tenéis previsto girar más a nivel estatal? ¿Qué futuro de giras tenéis actualmente?
Pet: Lo de los Fuzztones fue un sueño incumplido para mí. Soy fan de los Fuzztones desde que tenía 14 años, así que magínate el dolor. Nuestras próximas citas son: Bilbao (Satelite T), el 19 de junio, en sus Rabba Rabba Hey!; Txintxarri (Pamplona), el 2 de julio, y teloneando a The Shivas, el 28 de julio, en el Nébula. Sabemos que nuestro manager tiene varias cosas entre manos, pero no suelta prenda hasta tenerlas cerradas.
Voy acabando. ¿Qué es lo que más os gusta de girar? ¿Y lo que menos?
Pet: Lo que más, tocar, defender las canciones. Lo que menos, las resacas.
¿Tenéis alguna ciudad / sala que os resulte especial?
A mí personalmente me gustan el Bukowski, en Donosti, y el Nébula, en Pamplona.