Seguramente no tengamos perdón: llevamos meses repescando algunos de los mejores discos nórdicos de los últimos años y ni una triste mención a múm. Antiguos dominadores de la escena islandesa junto a Sigur Rós, su estrella se fue apagando con sus últimos discos. Early Birds, disco que recopila sus primeras canciones antes de editar su primer álbum, reivindicaba el pasado verano su legado. Por RUBÉN IZQUIERDO
- Recuperamos con Músicas Nórdicas Early Birds, trabajo que múm editó el año pasado para reivindicar algunas de sus obras fundacionales
- El disco llega después de que sus dos últimos LP¡s no lograse congraciar a crítica y público con el mismo entusiasmo que sus trabajos previos
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Nuestro serial Músicas Nórdicas fija hoy su mirada en múm, formación islandesa formada en 1998 que presentó el año pasado su última propuesta hasta la fecha, Early Birds. ¿Deberíamos decir última? Ahora lo explicamos. En cualquier caso, la formación ha venido practicando desde siempre un pop con tintes experimentales, y está integrada por Gunnar Örn Tynes, Örvar Þóreyjarson Smárason y las hermanas gemelas Gyda y Kristín Anna Valtýsdóttir.
Como apuntábamos, lo de apuntar que Early Birds era un disco nuevo es algo relativo. Las canciones que integran el álbum tienen más de 10 años de antigüedad, y enlazan directamente con el estilo musical de sus primeras obras, cuando empezaron a hacerse un nombre con Yesterday Was Dramatic – Today Is OK. Early Birds recoge en realidad algunas de las rarezas de aquella época, lo que vendría a ser una revisión de sus primeros años, aquellos previos al lanzamiento de su primer LP. La publicación de Early Birds supuso así un regreso a los orígenes después de llevar a cabo algunas concesiones comerciales en su último álbum, publicado en 2009 por Morr Music -viejos conocidos de esta sección, responsable de la edición de algunos de los mejores álbumes editados por la escena islandesa-.
Los 15 temas recogidos en Early Birds rinde tributo pues a los orígenes de la banda, un período de gran intensidad creativa que sirvió en parte para marcar nuevas tendencias en la música electrónica y experimental. Es esa consideración de «álbum antes de» lo que hace de este álbum un disco especial, recomendado sobre todo a los fans más acérrimos de la banda, rompiendo un silencio que se iba a los tres años.
Repasando su trayectoria, la primera publicación del grupo llegaría en el año 2000, cuando presentaron el citado Yesterday Was Dramatic – Today Is Ok, lanzado por TMT/Thule en Islandia y Tugboat en el Reino Unido y parte de Europa. Un año después llegaría el lanzamiento de Finally We Are No One, su segunda publicación y la última en la que participó Gyda, que decidió abandonar el proyecto para centrarse en sus estudios. Ya sin una de sus fundadoras, la banda edita Summer Make Good en 2004 y Dusk Log, éste último en formato EP. Como decíamos, todos estos trabajos son posteriores a los temas recuperados el año pasado, lo que le da al álbum un valor añadido de indudable peso, sobre todo para resumir la evolución de su sonido electrónico y experimental.
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La vanguardia como base
En sus orígenes, la banda se hizo un nombre escribiendo y mostrando en directo su peculiar versión de la soundtrack para el Acorazado Potempkin de Sergei Eisenstein, llevando a cabo su interpretación en directo a través de varias performances en teatros de Islandia (el Hafnadjordur Iceland) o Estados Unidos (Brooklyn Lyceum New York). Curiosamente su reconocimiento más grande llegaría de España, cuando se alzaron con un premio especial en el Festival de Cine de Gijón. Siguiendo esa evolución artística, Múm fueron invitados a tocar en el Holland Festival junto a la National Dutch Chamber Orchestra, llevando a cabo la interpretación de temas del autor vanguardista Iannis Xenakis.
Su producción artística se mantiene prácticamente regular hasta 2007, punto de inflexión para múm, que vio renovar su formación de manera considerable. Así las cosas, varios músicos han colaborado con ellos desde entonces, Tynes y Smárason abandonan el proyecto, que incorpora a Róbert Reynisson, a Eiríkur Orri Olafsson, a la cello Hildur Gudnadottir y el percusionista Samuli Kosminen, así com a Mr. Silla, multiinstrumentalista y vocalista.
El disco sirve además para romper la mana dinámica que arrastraba la banda, que acumulaba algunas decepciones con sus últimos trabajos, bastante más planos que los publicados a inicios de la década, un descenso que por otra parte coincidió con la marcha de las gemelas Valtýsdóttir, sin cuya presencia múm se dejó algo por el camino, sobre todo el toque naif que insuflaban a la banda.
El hecho de que estas grabaciones se produjeran antes de la llegada de las gemelas sirve en parte para reinvidicar el talante creativo de Örvar y Gunnar, a los que hay que atribuir la autoría de los 15 temas del álbum. La ausencia de ambas es el motivo fundamental que hace de Early Birds un trabajo instrumental casi en su totalidad, con alguna excepción simplemente adorable, como la soberbia Hvernig á að særa vini sína situada mediado el disco, cuyo videoclip puede consultarse al inicio del texto.
Early Birds fue, al fin, la carta con la que múm quiso volver a ganarse nuestros corazones el curso pasado, cuando los tiempos en los que compartían trono con Sigur Rós parecían ya lejanos. Un trayecto circular cuyo origen y final conviven en armonía de la mano de 15 joyas imperecederas.
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