Winston Yellen es el hombre que se esconde tras Night Beds. Su sonido reposado y con grandes dosis de folk lo convierten en una buena propuesta muy introspectiva, adecuada para el invierno que llega. Su inspiración llegó en un entorno muy especial: una casa construida antes de la guerra civil americana en Nashville, en la que también vivió Johny Cash. El resultado, la expresión de lo vivido en esta inmersión en el pasado. Por NORMA SOLANO.

• Su música está inspirada en lo que sintió durante la reclusión en la casa, que para él significó una experiencia cercana a un viaje al pasado.
• Yellen le añade un toque de suavidad a los elementos más típicamente folk.
• Night Beds presentará en directo el álbum, paralelamente a su lanzamiento, en varias ciudades de Estados Unidos, por el momento hasta el mes de marzo.

La mayoría de las canciones que aparecen en la propuesta de Night Beds harán las delicias de aquellos que encuentren placer en las canciones que tratan sobre soledad, recogimiento, y corazones rotos.

Winston Yellen, del que se dice que puede ser a Night Beds lo que Vernon a Bon Iver, es un joven de 23 años que, tras alquilar una casa de la época de la esclavitud en Nashville, y en la que posteriormente había vivido Johnny Cash, se encerró en ella durante 10 meses, en los que grabó los temas del que será su álbum debut, Country Sleep.

El sonido de Night Beds es esencialmente folk, ya que adopta los elementos más clásicos de la música tradicional americana, pero le añade algo de sinfónico que crea un ambiente distinto en sus canciones. Even if we try es la primera entrega de Country Sleep:

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El álbum debut de Night Beds se publicará a princípios de 2013 via Dead Oceans, El sello en el que han publicado bandas como Bill Fay o Tallest Man on Earth, y es altamente recomendable para todos los fans de bandas como Fleet Foxes o My Morning Jacket, por su parecido razonable.

Antes de la publicación del álbum debut, Winston Yellen tiene ya prevista una larga lista de conciertos por Estados Unidos, que le llevará, entre otros lugares, a Washington o Nueva York. Seguro que muchos disfrutarán con la propuesta de este músico que no duda en hablar del dolor.