No More Lies, en una imagen promocional para BCore

No More Lies, en una imagen promocional para BCore

El pasado 28 de Enero BCore publicaba In The Shade Of Expectation, el esperadísimo cuarto trabajo de estudio de No More Lies, una de las formaciones más históricamente ligadas al sello barcelonés, considerados por muchos como unos auténticos pioneros de la escena local. Su largo silencio, casi nueve años desde la aparición de 41º46.5’N 3º1.9’E y el excelente sabor de boca que dejaron a su paso en el último Sant Feliu Fest sirvieron para que las expectativas generadas en torno a este disco creciesen de un modo excepcional desde su mismo anuncio, generando un caldo de cultivo que ha terminado por cristalizarse en este formidable In The Shade Of Expectation, trabajo con el que han demostrado que todo sigue donde debe, en la misma cumbre desde lanzaron su anterior disco.

Con el prestigio consolidado, previamente llegarían Seeds Of Enthusiams y ][ en su cuarto disco siguen siendo los mismos, aquel grupo de amigos que, juntándose para tocar a finales de los 90, lograron traspasar fronteras y situar en el mapa musical a Sant Feliu de Guíxols. Hemos hablado con su bajista, Maxim Triviños, para captar las sensaciones de la banda ante una gira de presentación, la suya, que tiene sus primeras fechas este fin de semana en Barcelona y Madrid. No More Lies son Santi García (voz y guitarra), Maxim Triviños (bajo) y Roger Ortega (batería). Una entrevista de RUBÉN IZQUIERDO

En 2008 hubo un momento que nuestra relación se oxidó y en aquel momento no tenía sentido seguir

Shook Down: Volvéis casi nueve años después de vuestro último disco. ¿Hubo algún punto en el que visteis claro lo de volver?
La pausa llegó en 2008. Los motivos fueron, bueno, que el grupo se había planteado desde siempre como un grupo de tres amigos que tocan juntos y la relación en ese momento estaba un poco oxidada. Llegó un momento en el que no tenía sentido seguir sin estar bien entre nosotros, así que decidimos parar.

¿Y qué pasó luego?
Pasaron  tres años y medio, más o menos, hasta mayo de 2011. Aina querían venir a tocar, hacer un par de conciertos en a Tolosa y Sant Feliu, y la condición era que tocásemos con ellos. Dijimos que OK y nos reunimos durante un mes, por tal de refrescar el repertorio. A partir de ahí fueron saliendo más bolos, en Sant Feliu, con Hot Snakes, por ejemplo, y volvimos a quedar para hacer unos toques. Al final te das cuenta de que la cosa vuelve a tirar, te ves con 4 o 5 temas, y te dices… «tendríamos grabaremos algo». De todas formas, si se tiene en cuenta que ya de por sí somos una banda poco prolífica  entre que haces el disco, la gira, el parón después… te salen los 9 años.

¿Cómo fue el proceso de creación de las canciones? ¿Se crean todas una vez decidís volver o había alguna creada previamente?
Whong Stage bad scenario sí que estaba en un recopilatorio previo. A partir de lo de Aina empezamos a ensayar repertorio y cuando te ves 4 o 5 temas es cuando nos planteamos volver. De ahí pasamos a fijarnos una fecha para exigirnos a nosotros mismos y ya es cuando todo se acelera y trabajamos con las canciones nuevas

A nivel estilístico, ¿dónde situamos el nuevo disco? 
Melódicamente es como el anterior. De estructuras similares, sobre todo a nivel de canción. Algunas partes de guitarra si que son más del Tornado (nota: su segundo disco, editado como ][), por lo que tal vez al final sea un híbrido… Nosotros somos los mismos, los de siempre: tocando lo que nos sale, lo que nos gusta y lo que sabemos hacer

No More Lies, vistos por Lluís Torroella

No More Lies, vistos por Lluís Torroella

¿Pioneros? Hubieron otros antes. Aina nos abrieron el camino a muchos

Viniendo para aquí me he leído las notas promocionales del disco. Se habla mucho de la figura del pionero. ¿Os sentís así?
La figura del pionero… bueno, no estoy de acuerdo del todo. Los que abrieron las puertas de verdad fueron Aina y creo que es de justicia que se diga. Nosotros en el 2003 también giramos, pero en aquella época Standstill también hacían giras. Los Tokyo un año después también, pero antes estuvo Aina.

¿Cómo recordáis aquellas giras?
En la primera llegamos a Eslovenia y teníamos programadas fechas también en República Checa y Polonia, aunque tuvimos aquel célebre accidente en ruta que nos dejó sin los bolos. Fue en Viena… Después hemos hecho lo que se hace más a menudo: Alemania, Bélgica, Holanda… pero en Reino Unido, por ejemplo, no hemos tocado nunca. Pero los primeros en patearse Europa fueron Aina. Y antes, si quieres, Subterranean Kids

Más allá de eso, que también, está el fenómeno Sant Feliu, donde en cierto modo también sois unos pioneros. 
Sant Feliu es fenómeno curioso. A principios de los 90 ya había algo de movimiento… BCore, por ejemplo, editó Virtual Noise en cinta y en single. Después estuvieron también Passion Fish, que no eran bien bien de Sant Feliu, aunque el batería si lo era y ensayaban allí… Aunque fuesen de Barcelona veías un vínculo. Después salieron bandas que no acabaron de fructificar, y luego ya Hopeful y nosotros.

La tradición ha perdurado con más bandas que han ido viniendo después…
Aparecieron Bullit, y entre medio Crossword, donde tocaba Víctor, el hermano de Santi. Salieron también con BCore… Aunque de todas formas en Sant Feliu siempre han pasado cosas: cuando yo era niño ya iba a ver grupos punkis que salían del pueblo (risas). De grupos que hayan salido fuera quizá si, junto con Hopeful.

¿Cómo se consolida una propuesta como L’Atzavara?
Sobre todo, con gente y ganas que quieran sacarlo adelante. Y bueno, hay una figura importante, Agustín Segura, que hace de nexo. El Agus, como le llamamos,  ha estado en muchos grupos también, y aunque no ha editado en formato físico ha tocado mucho por la zona, además de serel gran nexo de L’Atzavara.

Màxim, el pasado mes de agosto en el Sant Feliu Fest // E. Mató

Màxim, el pasado mes de agosto en el Sant Feliu Fest // E. Mató

¿Cómo funciona L’Atzavara?
Es una asociación sin ánimo de lucro, que monta conciertos y organiza el festival. El Agus siempre ha estado,  y el resto vamos haciendo cuando podemos. Somos como los activistas, aunque es algo abierto. Si te pones te pones y te acabas involucrando… Al final acaba siendo algo que se mueve con gente que tiene ilusión y ganas, que se mueve por su gusto por la música.

¿Recuerdas las primeras ediciones?
Los dos primeros festivales los montó Elm Puig, el bajista de Hopeful. Después se fue para Barcelona, pero aquello fue la semilla. Festivales así hay más por Catalunya, como el Soroll de Vidrieras o, antes, el Karate Punk de La Roca. El secreto es un poco el que contábamos: gente que quiera hacerlo, que le dé continuidad, y luego un mártir que se dedique con pasión. Nosotros tenemos al Agus

Siendo el Sant Feliu Fest importante como es para vosotros, que el retorno del año pasado fuese allí sería especial para No More Lies
Este año tocamos nosotros y Hopeful, que volvían tras siete años. La de Hopeful fue como una reunión especial, un concierto de reunión para ellos. Ahora viven en ciudades diferentes, así que tenía que ser uno de los conciertos más especiales de la pasada edición, la actuación estelar. Y lo fue.

¿Y vuestro concierto como lo recuerdas?
Tocamos algunas canciones nuevas, cinco total… aunque en realidad fueron cuatro, porque estaba todo muy verde. Estábamos aún en el proceso de creación del disco y decidimos tocar cinco nuevas para probar, de las siete u ocho que teníamos casi acabadas.

No More Lies, en el Sant Feliu Fest // E. Mató

No More Lies, en el Sant Feliu Fest // E. Mató

Con Pelle Gunnerfeldt queríamos una visión externa. Al final de su propuesta nos quedamos con dos canciones

Volviendo al disco, dos de los temas se mezclaron en Suecia, Spirial Desidia y Convinced.
Es la otra gran historia del disco. Santi quiso mantenerse al margen en todo lo referente a la grabación, quería disfrutar del proceso tocando como nosotros, como Roger y yo. Así que nos grabó su hermano Víctor en Cal Paul, durante cinco días. Las voces las grabamos después en Ultramarinos y poco después se envío a Estocolmo para las mezclas.  Allí las trabajó Pelle Gunnerfeldt, que ha trabajo con The Hives, Randy… Le propusimos que nos hiciera la remezcla, en parte para tener una visión externa, con un toque personal propio. Hay que decir que Pelle tiene un rollo lo-fi, lo-fi dentro de bandas que tocan potente como las dichas, que nos gusta mucho.

¿Qué pasó luego?
Cuando nos envió las mezclas, sentimos que no se acercaba a lo que queríamos y lo acabó mezclando Santi. De las mezclas de Pelle nos quedamos con dos, donde si que casaba mucho más lo que había hecho con las canciones y así se quedaron los temas de Spiral desidia y Convinced.

El trabajo interno de la banda, ¿ha cambiado en este disco?
En realidad no, siempre trabajamos igual. Todo surge de un toque de guitarra, y a partir de ahí construimos lo demás. Desde que empieza hasta que acaba, si es que acaba. Por lo general tenemos un modo de componer muy cercano al rock, aunque en ocasiones las trabajamos en base a la melodía y la letra, que sería algo más pop, pero casi todo se hace como comentaba al principio.

Hablabas de las pausas, una constante en vuestra carrera
Si lo piensas, tiene su lógica. Si grabamos tenemos que estar convencidos. En ese sentido somos amateurs, y viva el amateurismo. No respondemos  a un contrato en el que por obligación tengamos que hacer x discos en x años y en eso ganas libertad. Así que cuando nos ponemos es que estamos convencidos del todo, y podemos ponernos con los temas, ponerle letras a las canciones… A eso suma la fase de presentaciones, en la que ensayas solo el repertorio y te vas casi al año y medio. Entre que preparas el disco, lo presentas, lo giras y te pones con el nuevo ya casi han pasado los tres años de media que nos sale por disco.

Los No More Lies, en otra imagen promocional

Los No More Lies, en otra imagen promocional

Vuestro anterior disco lo grabasteis en Chicago…
Aquello fue una experiencia nueva. Fue llegar al estudio y alunciar. Santi ya había estado pero cuando entramos me acuerdo que le dije a Roger: «qué, Roger ¿qué haremos aquí?», y él me dijo: «no lo sé, pero disfrutar seguro». Todo vino porque en un bar de Sant Feliu conocimos a John Humphrey, de Engine Studios, y a Mike Miller. Hablando y hablando sobre música acabábamos contándoles lo del estudio de Santi y estrechamos el contacto. Lo grabamos en analógico y aquí ya lo volcamos en digital, pero cuando lo escuchas se nota que se grabó así. El estudio era brutal y ves como se trabaja allí, la tradición que hay. Es otra historia, otra cultura, aunque claro, allí llevan décadas y décadas, y aquí en el 75 aun había un señor con bigote…

Es otro mundo, vaya
Lo ves sobre todo en al técnica, que es algo que empieza a verse aquí: gente joven con una técnica de la ostia. Si te gusta el rock, el punk o el garage ir allí es importante. Es como todo, si te gusta J te vas a Aragón…

Para tocar tenemos que estar convencidos, el rodaje llegará tocando

Volviendo a In The Shade Of Expectation, comenzáis ya los conciertos de presentación…
Tenemos Barcelona y Madrid ya mismo, con los Encono. Estamos contentos de tocar, y además llevo uno días escuchando a Encono y muy bien, son de nuestro rollo, así que de puta madre. Creo que estará bien. Por nuestra parte haremos lo posible por defender nuestro directo. Quizá nos falta algo de rodaje, aunque la semana pasada estuvimos en Vic y  Tarragona y salimos contentos… El rodaje llega tocando, es probable que cuando acabe la gira estemos ya bien (risas)

Después de la gira llega el showcase del Primavera, ¿no?
Hay más cosas, también. Está País Vasco, Castellón, Girona… Para tocar necesitas confianza y la confianza la vas tomando poco a poco

¿Fuera tenéis algo pensado?
La idea es coger fines de semana, enganchar conciertos dos o tres días. Nos gustaría mucho con los Daria, una banda con la que Santi lleva queriendo trabajar, y que por circunstancias no ha podido aún, y para un poco más adelante probaremos Suiza

¿En festivales de aquí os veremos?
Tenemos el showcase de BCore en el Primavera, que será interesante. Además es en La 2, que es una sala que para nuestro sonido va genial. Tocar en festivales grandes tiene sus ventajas: llegas a más gente, puedes enganchar a público nuevo, pero nuestro formato ideal es el de 200 personas, es cuando disfrutamos más.

Hace un par de Primaveras os vimos en otro contexto…
Abrimos el festival en la jornada del Arc de Triomf, una locura. Es cierto que cuando salen cosas interesantes vas de cabeza, aunque nosotros disfrutamos más en contextos como el Sant Feliu, tocando con grupos más de nuestro palo. Pero sí, tocar en festivales grandes tiene sus ventajas, claro.

¿Os veremos en el Sant Feliu Fest 2014?
Hace dos años perdimos las subvenciones del festival, y ya el año pasado tuvimos que volver a las raíces, la campaña del Back to the roots y fue genial. Vinieron bandas estatales, algunas incluso perdiendo dinero, y el ambiente fue muy bueno. Este año aún no nos hemos puesto con el proceso, pero ya tenemos algunas ideas.

Póster del concierto con Encono

Póster del concierto con Encono