A mediados de 2015, justo el año en el que Lana del Rey anunciaba su regreso, otra joven cantautora de origen californiano ha llegado dispuesta a quedarse con un lugar privilegiado en el exigente circuito anglosajón. Siendo justos, presentar a Pearl Charles como una recién llegada sería faltar a la verdad: su recorrido como autora viene de lejos, desde que se estrenara a los 18 años formando parte de varios proyectos musicales. Cumplidos ahora los 23, Pearl Charles presenta estos días en Estados Unidos su EP de debut, un lanzamiento que colgó el sold out a las pocas semanas de editarse y que la mantendrá ocupada hasta bien entrado el 2016. Sin fechas previstas hasta el momento, Pearl Charles hace un alto en su gira de presentación para repasar con nosotros sus primeros años. Entrevista publicada en Shook Down UNDERZINE vol. 5 

Texto: RUBÉN IZQUIERDO
Traducción: ANITA MARTÍNEZ
Fotografías cedidas por PEARL CHARLES

Tienes 23 años y cuentas ya con una carrera bastante sólida. ¿En qué momento decidiste que era hora de empezar tu proyecto en solitario?
Es cierto que he estado en varios grupos y proyectos, más o menos desde los 18 años. Ahora llevaba un tiempo en el que sentía que mis canciones o aportaciones quedaban siempre relegadas, por lo que me apetecía mucho cambiar mi rol. Hace un par de años me empezó realmente a picar el gusanillo y decidí ponerme a acabar algunas melodías en las que había venido trabajado por mi cuenta, sin tener del todo claro qué acabaría haciendo con aquello. Eran canciones a las que no había dado salida en los grupos en los que venía colaborando, así que decidí ponerme con determinación, encontrar mi propia voz y mi propio sonido y acabarlas. Llegado ese punto vi claro que había llegado el momento de cambiar mi papel de figura secundaria en una banda a liderar mi propio proyecto.

No todo el mundo puede decir que ha debutado con un sello con la historia de Burger Records. ¿Qué relación tenías con el sello antes de empezar?
Mi relación con Burger Records es anterior al lanzamiento del disco, porque con mi anterior banda, The Blank Tapes, había sacado un par de cintas con ellos. Debo decir que la gente de Burger siempre me ha apoyado, y ya el año pasado tuve la suerte de tocar en su fiesta para grupos femeninos “Burger A-Go-Go”, bastante antes de publicar nada como Pearl Charles. Así que sacar la cinta con una discográfica con la que ya teníamos una relación genial parecía la opción más lógica. Estamos muy contentos.

No sé si la presencia de Burger Records ha sido de ayuda a la hora de promocionar el álbum, pero me da la sensación de que está recibiendo una buena acogida. ¿Cuáles eran tus expectativas antes del lanzamiento? ¿La experiencia que tenías de otros proyectos te resultó útil?
Aunque había estado en otras bandas anteriormente y había pasado por todo el proceso con anterioridad, si te soy sincera no tenía ni idea de qué esperar en esta ocasión. Lo primero que decidí es buscar un manager para poder centrarme únicamente en la parte creativa del lanzamiento en vez de tener que llevar todos los elementos externos, que es algo que previamente sí tuve que realizar. Tener que ocuparte de todo hace que te distraigas del proceso creativo, cuando este es uno de los más importantes, y en esta ocasión tenía la dificultad añadida de no tener publicado nada previamente como Pearl Charles. Eso hizo que exponerse tanto fuese un poco desquiciante al principio, sobre todo por el hecho de tener que cargar toda la responsabilidad del disco sobre mí misma.

Creo que esta experiencia ha permitido que tu música se haga un hueco en la escena de Los Angeles, algo que creo que no es nada fácil dado lo enorme de la ciudad. ¿Ayuda que tu música suene tan californiana como lo hace? ¿Te imaginas en un lugar diferente?
La verdad es que nací y crecí en Los Angeles, y me siento muy cómoda aquí. Es cierto que vivo y trabajo para viajar, y mentiría si no te dijese que en ocasiones he tenido la tentación de mudarme a otros sitios, pero siendo honestos con los tours el cupo de carretera lo tengo completo. Con Los Angeles tengo una relación muy especial y siempre será mi hogar, pero tengo una pequeña vía de escape cuando la ciudad me agobia. Es un lugar llamado Joshua Tree, al que intento ir siempre que puedo.

Antes hablabas de The Blank Tapes. Tengo entendido que tu primera banda fue The Driftwood Singers. ¿Qué recuerdas de aquella época?
Fue una experiencia increíble, algo que también te diría si me preguntas por The Blank Tapes. Las dos aventuras fueron geniales para aprender de gente que en ese momento tenía mucho más conocimiento que yo sobre el funcionamiento de muchas cosas, sobre todo del proceso de ser músico y todo lo que significa llevar el peso de una banda y tratar de ser un compositor profesional. Estar en The Driftwood Singers me enseñó mucho, aprendí mucho acerca de la necesidad de grabar y girar para rodarse como músico. Es casi tan importante como el tener impulso o talento para escribir y tocar canciones.

Todo el concepto visual de The Driftwood Singers es muy clásico, en el buen sentido de la palabra. Creo que es algo que se repite en Pearl Charles. ¿Cuáles son las principales influencias en tu música?
Antes de estar en The Driftwood Singers no conocía Gram Parsons, y la enorme influencia que tuvo en un género tan importante como el country rock. Aunque mis influencias para ambos proyectos van más allá de Gram creo que es una influencia muy importante, por más que escuche también música creada mucho antes de que él destacase, y mucho después. A día de hoy no puedo evitar pensar que mi manera de conectar con su música o con Joshua Tree me impulsó a buscar más country clásico, así como country folk de los sesenta o setenta. Sin esas primeras conexiones no hubiese investigado qué pasó en lugares como Muscle Shoals, en Alabama.

Pearl Charles es el matrimonio perfecto entre lo que aprendí con The Driftwood Singers y lo que asimilé con The Blank Tapes

Pearl Charles_02Con ello no quiero decir que sean proyectos necesariamente parecidos entre sí: aunque haya una conexión se adivinan matices y pasas de un sonido más folk y americana a otro más sixties. ¿Qué diferencias ves en lo creativo?
A medida que he ido presentando mi primer EP como Pearl Charles me he dado cuenta que lo que presento ahora es algo así como el matrimonio perfecto entre lo que aprendí con The Driftwood Singers y lo que asimilé con The Blank Tapes. Si te soy sincera al principio tenía un poco de miedo de que la gente asimilara Pearl Charles como un proyecto eminentemente country. Siento un gran amor hacia ese tipo de música, pero con The Driftwood Singers experimenté algunas limitaciones en cuanto a acogida por esa línea, y supongo que eso me hizo buscar algo más expansivo, aunque sin renunciar a todo lo demás. Por eso una de las cosas que más feliz me ha hecho una vez el EP ha sido publicado es ver como la influencia del country clásico se mantenía inherente al disco: ahora sé que puedo trabajar mi música sin alejarme de eso, y que puedo unir mi amor por la música psicodélica con el pop, el folk o el country. Quién sabe, quizá me ayude a intentar romper algunas barreras que mantienen las diferentes corrientes alejadas, excluidas de la mirada de otra gente.

Es curioso lo que comentas sobre el country porque en muchas reseñas se resalta tu sonido sixtie….
Mentiría si dijese que no me encanta la música de los sesenta: muchos de mis artistas favoritos empezaron en aquella época. Habiendo dicho eso no quiero encasillarme a mí misma en esa década: me encanta la música de todas las décadas, antiguas y nuevas, y algunos de mis artistas favoritos que empezaron en los sesenta sacaron algunos de sus mejores trabajos en los setenta y más adelante. Me gustaría poder seguir moviéndome en géneros o estilos diferentes.

Supongo que una de las consecuencias de trabajar con Burger Records es que el EP aparezca en formato casete. ¿Qué otros casetes tienes en tu colección?
Tengo un montón de casetes en mi colección, de Burger Records y de Lolipop Records —otro sello independiente que saca muchos de ellos— y quedan perfectos junto a esos casetes baratos de algunas de mis bandas favoritas que se encuentran en las tiendas. Ahí tengo de todo, de Bruce Springsteen a Patsy Cline.

Otro capítulo importante en tu carrera, que salía al principio de la entrevista, es tu colaboración con The Blank Tapes. Con ellos hiciste gira por una gran parte del país. ¿Fue una buena escuela?  
Matt Adams de The Blank Tapes es uno de los músicos con más talento con los que he tenido la suerte de colaborar. Aprendí muchísimo y pude viajar por casi todo el mundo tocando con él. Aún trabajamos y tocamos juntos, y ha tocado y producido gran parte del EP que presento ahora. Nunca he visto a nadie manejar y sacar adelante las canciones como lo hace él: es realmente prolífico en todo lo que hace.

En 2015 después de colaborar con Jonathan Wilson o Jonathan Rices, decidiste empezar tu proyecto en solitario. Tu debut es un EP de seis canciones. ¿Se han quedado muchas canciones fuera?
Decidí sacar un EP en lugar de un álbum completo porque cuando empecé a recordar cómo habían sido las sesiones de grabación del EP me di cuenta de que habían capturado muy bien un estilo concreto en el que había estado trabajado en aquel momento, y todas la canciones quedaban unidas y cohesionadas entre sí. Las canciones que guardé para el LP, así como las nuevas en las que estoy trabajando ahora, vienen de un lugar distinto, en el que recibo con los brazos abiertos mis raíces country, manteniendo algunos de los sonidos con los que senté las bases para el EP.

En cierto sentido, la canción que podría definir el proyecto es “You Can Change”. ¿Pensaste siempre que este sería el single de presentación?
Es interesante que me lo preguntes. Creo que lo que atrae a ciertas personas hacia algunas canciones es diferente para cada uno, y al final cada cual tiene sus propias favoritas. A mí siempre me encantó “You Can Change” porque sentía que tenía un formato diferente y un contenido más lírico que muchas de las otras canciones del disco, y parecía inspirar a mucha gente en la que confío, que me dieron el mismo feedback. Así que, cuando llegó el momento de elegir un single, salió solo.

¿Qué nos puedes contar de ella?
“You Can Change” va sobre el dilema espiritual con el yo que personalmente lidio y con el que creo que otra gente también se puede identificar: la idea de que tenemos el poder de cambiar las cosas en nuestras vidas con pensamientos positivos, y la dualidad que genera el hecho de que hayan cosas que parecen deprimirnos y de las que es difícil salir. Fundamentalmente trata sobre ese dilema o lucha, dilo como quieras.

Para preparar el disco colaboraste con Joel Jerome (La Sera, Cherry Glazerr) o Taylor Locke. ¿Te sientes conectada con la escena de Los Angeles? ¿Con qué bandas es mayor esta conexión?
La escena musical de Los Angeles es realmente increíble. Todo el mundo se apoya, y al final te sientes formando parte de una familia pequeña y unida. Una de las mejores cosas que me han pasado en Los Angeles es acabar conectando con artistas con los que a priori la conexión sería más complicada, porque sus gustos musicales o influencias no se parecen a los tuyos. Algunos de esos músicos, pese a esa contradicción inicial, se han convertido con el tiempo en algunos de mis mejores amigos, y en personas muy inspiradoras para mí.

En Instagram has comentado en varias ocasiones sobre el estilo de los sesenta, algo que en parte se deja ver en tu artwork, tu manera de vestir en las fotografías promocionales o en tus propios shows. ¿Qué importancia le das al elemento visual en tu puesta en escena?
Mis padres fueron artistas y trabajaron con varios medios visuales, así que siempre he tenido muy presente esa parcela y su importancia a la hora de dar a conocer tu música. Me encanta ver la música como un medio de expresión artístico que, además de colmarte a nivel creativo, te permite trabajar en otras disciplinas, ya sea haciéndolo tú mismo o colaborando en otra parcelas como el cine, las artes gráficas para la portada y el diseño de los carteles o todo el tema relacionado con la moda. Es muy enriquecedor.


Ya termino. Vi que hiciste una fiesta de presentación un tanto especial, en la Old Style Guitar Shop. ¿Con qué sensaciones te quedas cuando presentas en sitios pequeñitos como ese? ¿Es importante tener al público cerca?
Me gustó mucho hacer la presentación allí. Que no fuese en una sala o teatro convencional le dio un toque diferente. Es cierto que sacrificas algunas partes del sonido, pero son conciertos bonitos, en los que público y artista conectan de manera íntima. Todo eso hace que el público se adentre activamente en la presentación y creo que es algo muy valioso. Hay bandas como The Grateful Dead que lo consiguen a menudo: son capaces de crear una sensación especial en cualquier tipo de escenario. Me gustaría alcanzar esa habilidad.

Escucha el disco de debut de Pearl Charles aquí: