Tras haber destacado a lo largo de estos últimos meses como agencia de management Great Canyon Records da el salto y se presenta ahora como sello discográfico, una aventura que arranca con los lanzamientos de la cantautora rock Marta Delmont y del artista Bernat Sànchez, presentado bajo el pseudónimo artístico Murdoc. Hablamos con David Gímenez, uno de los impulsores del sello junto a la cantautora vigatana Joana Serrat, sobre los orígenes del sello y el planteamiento con el que nace.

Hola David. Acabáis de presentar el sello, ¿con qué ambiciones surge?
Llevo muchos años trabajando al lado de artistas desde mi faceta como mánager, como programador de la desaparecida Sala Castelló de Barcelona, co-organizando festivales en Tenerife y como colaborador para las revistas Go-Mag y H Magazine, y el suplemento cultural Què Fem? de La Vanguardia. Siempre, y en casi todos los casos, he tenido la percepción de que algunos de ellos lo único que piden es un trato profesional, respetuoso y familiar por igual. A nuestros artistas les hemos sido honestos. Les hemos dicho que no podemos garantizar portadas de revistas y ventas millonarias, pero sí les hemos jurado honestidad, entrega y sacrificio. La ambición por la que preguntas, nuestra ambición, es que ellos sientan que hay alguien que cree en ellos, apuesta por ellos, y hará todo lo posible por ellos hasta donde lleguemos con nuestras limitaciones económicas y humanas, que son muchas. Esa es nuestra principal ambición, junto a la de publicar buenos discos.

El sello toma el nombre de la promotora Great Canyon, lo que imagino que es un paso más en el trabajo interno de la casa. Para quien no conozca Great Canyon, hablar un poco del camino recorrido hasta la fecha.
Great Canyon nació sin saberlo hace mucho años, cuando comencé a dar mis primeros pasos en la música, trabajando, celebrando cada éxito y sufriendo cada revés junto a los grupos con los que trabajaba y de los que me sentía integrante de pleno derecho. De manera oficial, el nombre nace paralelamente a la publicación del segundo álbum de Joana Serrat, “Dear Great Canyon” (El Segell del Primavera, 14). Tras una etapa de aprendizaje junto a las bandas Cabeza Borradora, Pumuky y Partido, creí que era el momento de dar un paso al frente y crear una agencia que no solo ejerciera el rol mánager al uso, si no que también llevara a cabo tareas propias de un productor económico y artístico, que fuera un ‘coach’ del artista, potenciando sus virtudes, sus capacidades. Primero comencé a trabajar de este modo con Joana, luego vino CARLA, y ahora  le siguen Marta Delmont y Roger Usart. Murdoc es un caso aparte.

El hecho de que Joana se implique en el proyecto imagino que de alguna manera marca la línea estilística, cuanto menos a nivel de gustos y afinidades. El debut de Marta Delmont llega de hecho con la producción de la propia Joana. . ¿Qué vínculo había con Marta antes de empezar a trabajar de manera conjunta?
Joana está en el proyecto porque ella vive la música 24 horas al día, y porque le hacía mucha ilusión dar un paso más allá. Lo de la producción de Marta Delmont llegó de manera natural, aunque la historia de dar con ella no es muy habitual. Di con ella a través de su perfil privado en Instagram. Me llamó la atención todas y cada una de las portadas de los discos que había colgado. Eran discos de referencia para mí. Luego di con algún clip de audio casero, de apenas 15 segundos de duración. Intuí que había algo muy importante detrás de aquello. Contacté con ella y le pedí que me enviara algunas canciones, grabaciones de audio hechas con el móvil. Escuché aquellos temas, desnudos, ahogados en ruido blanco y caí rendido. Yo quería una producción americana y rockera para ella, y confiaba en Joana para este trabajo. No hay que olvidar que Joana lleva unos años -y dos discos-, trabajando junto a grandes nombres de la escena musical canadiense. Entre su intuición y lo aprendido, confiaba más que sobradamente  en el resultado final. Se lo propuse, y aceptó.

En el caso del disco de Marta la implicación va más allá, y los Great Canyoners participan en la grabación. ¿Hasta qué punto ha sido importante el bagaje previo en el proyecto de Joana para plasmar la producción?
Joana es feliz en un estudio de grabación. Creo que solo saldría de allí para dar un largo paseo, airearse, hablar con gente muy diversa y regresar enseguida con fuerzas renovadas a continuar con las sesiones. Como no puede grabar un disco propio cada mes, estar con Marta y con buena parte de sus músicos fue un verdadero placer para ella. Era inevitable que, buscando un sonido que tenía muy claro en su cabeza, contara con los músicos en los que más confía.

Joana edita en nuestro país con  El Segell. ¿Van a haber sinergias con otros sellos?
Si una cosa he tenido clara desde que estoy en esto es no ponerme límites, pero ir paso a paso y sabiendo en todo momento donde estoy, y qué soy capaz de hacer (y qué no). Tenemos una red de contactos creada gracias a la internacionalidad de Joana pero, ciertamente, ni nos lo planteamos, ni nos lo dejamos de plantear.

El sonido Bernat Sànchez presenta diferencias respecto a esa línea estilística. ¿Cómo se gesta su colaboración?
No tengo claro que Great Canyon Records vaya a tener una línea artística muy marcada. Nos movemos por otras directrices: que nos gusten los artistas y sus repertorios, que nos dejen opinar para acabar siendo uno más del proyecto de cada uno de ellos. Así ha sido con Marta y con el futuro álbum de Roger Usart. Murdoc no cumple el último requisito, no hemos tenido incidencia alguna en el resultado final de su disco, pero se lo perdonamos porque es un tipo adorable. Bernat es el guitarra eléctrica y teclista de los Great Canyoners de Joana Serrat. Él buscaba a alguien que realmente se interesara por sus canciones, y a nosotros nos encantan las suyas. Tenía el disco acabado cuando nosotros comenzamos a hablar de traer al mundo una discográfica. Blanco y en botella…

Hay también colaboraciones puntuales, alguna de ellas gestada en Canadá, imagino que durante la estancia de Joana allí. ¿En qué os vais a basar para potenciar vuestros lanzamientos?
Como he dicho antes, no tiene vocación nacional, ni internacional. Solo sabemos trabajar pensando en qué es lo mejor para nuestros artistas dentro de nuestras posibilidades. En Canadá tenemos buenos amigos, y tanto en el caso tanto de Marta como en el de Roger Usart, les hemos enseñado en lo que andábamos metidos. Gavin Gardiner (The Wooden Sky) se prestó a tocar la guitarra eléctrica en un tema del disco de Marta, Ryan Boldt (The Deep Dark Woods y Yarrow), la voz en el disco de Marta y, yendo más allá, quiso producir el disco de Roger. El de Usart verá la luz en el otoño/invierno de este año. Es un gran disco de puro folk ‘roots’. Ryan se ha implicado tocando guitarras también y Joana ha hecho lo propio añadiendo segundas voces. ¿Ves? Todo queda en casa.

Siguiendo con lo mismo, contextualizar la masterización de Silver Blaze en Canadá, a cargo de Harris Newman.
Confiamos ciegamente en Harris. Tiene un currículum espectacular (Arcade Fire, Tindersticks, Vic Chesnutt) y con el resultado de su trabajo en los dos últimos discos de Joana (“Dear Great Canyon” y “Cross The Verge”) estamos muy felices. Hay que hacer las cosas los más fáciles posibles. Si confías en alguien, hay que apostar por él.

El segundo de los lanzamientos que habéis anunciado es el de Bernie Sánchez como Murdoc. Las canciones que presentáis se compilan en el disco Deprimix, Placalt, Malin. Más allá de las acotaciones psicodélicas que anunciáis en las notas, ¿cómo presentariáis esta referencia?
Murdoc es un músico inclasificable, una coctelera sonora maravillosa. Lo que cuenta, lo que canta, es pura cotidianidad bañada de humor que no pretende serlo. Es maravilloso y doloroso. La vida misma.

El listado de colaboraciones de Sánchez previo a la grabación de su disco es notable: ha colaborado con nombres como Eric Fuentes, Joan Thelorius, Mine! o Eh!. ¿Cuándo y cómo se decide este salto en solitario?
D: Creo que lo llevaba dentro desde hace tiempo y necesitaba sacarlo. Es su particular octavo pasajero.

Volviendo a la gestación o presentación del sello, me gustaría saber el peso que le vais a dar al formato físico. ¿Apostáis por algún soporte en concreto?
Somos de los que amamos el soporte físico pero utilizamos todos los posibles. Nuestros discos saldrán en CD y digital. Si no salen en vinilo es por una cuestión estrictamente económica, no por falta de ganas. Adoramos el peso de los 180 gramos, la portada, los encartes… Pero, de momento, nos tenemos que contentar con asomar la cabeza de esta manera.

Ya acabo. ¿Qué fecha de salida contempláis para el sello? ¿Haréis conciertos de presentación?
Great Canyon Records se estrenará oficialmente el 27 de mayo, con la salida del primer álbum de Marta Delmont, “Silver Blaze”. El 10 de junio, editaremos “Deprimix, Placalt, Malin” de MURDOC, y antes de acabar el año, saldrá el de Roger Usart.  Por ahora no habrá presentación oficial en vivo del sello, aunque Marta Delmont presentará su debut el 10 de junio en el FNAC Triangle (Barcelona).