Es probable que el estreno de Dazed sirva a su vez para recuperar y reivindicar los logros exhibidos con Virgin, el anterior trabajo de Sweet Valley Slumber Party, un disco que seguramente mereció un mayor recorrido que el que disfrutó, y que aprovechamos para recuperar también por aquí. Por R. IZQUIERDO
- El dúo californiano presentaba por sorpresa la semana pasada el que su segundo disco
- Tras firmar Virgins en 2012, Sweet Valley Slumber Party ratifican sensaciones con Dazed
Superada la relativa pausa en la que andaba metida el grupo, hace tan solo unos días anunciaban su regreso de tapadillo, a través de un mensaje en sus redes sociales en el que, de paso, nos contextualizaban el parón. El resultado nos presenta un disco excelente, que confirma todo lo bueno intuido ya en su primer LP, y que nos lleva a lamentar el relativo descanso en el que el grupo se encuentra, una temporada de barbecho productiva en otras lides que no ha impedido que ambos se marquen aquí un retorno sorpresa con un tracklist muy sólido, a la altura de su lanzamiento anterior.
Los 10 temas aquí presentados han sido masterizados por Alex Slob, mientras que la edición ha corrido a cuenta de Lollipop Records -en formato cassette, marca de la casa habitual en el sello, que suma así un nuevo acierto tras la edición de las rarezas de Peach Kelly Pop, entre otras joyas-, suponiendo una digna continuación a su carta de presentación gracias a temas como el homónimo Dazed o Breathless.
Como comentábamos al principio del texto, el lanzamiento interrumpe un período de relativa inactividad, que ha tomado algunos meses en el devenir interno de la banda. Durante ese período Kam Andresen, presente también en Youth Cattle, estrenó nueva aventura musical con Girl Tears, mientras que Bethel Ligad retomó sus estudios, aunque como ellos mismos desvelaban antes de publicar el disco todo ello pasaría después de las grabaciones que han terminado por dar forma al álbum.
El aire cálido del disco «este es un álbum acerca del amor«, comentaba Bethel en las redes sociales, contagia desde su primera escucha, una candidez lo-fi, también dream pop, que reivindica el modelo y nos recupera el proyecto. Bienvenida sea su vuelta.
Escucha el disco en Bandcamp: