Tras cosechar un merecido éxito con el triple disco “Denbora Da Poligrafo Bakarra” (Only In Dreams, 2014) que conmemoraba el 20 aniversario de la formación, la banda de Lekunberri Berri Txarrak editó el año pasado “Infrasoinuak” (Only In Dreams, 2017). Un disco corto pero directo e intenso. Diez pildorazos energéticos producidos por Bill Stevensons, batería de Black Flag y Descendents, y que nos presenta a la banda más activa que nunca gracias también a su reciente paso por Asia, Australia y Nueva Zelanda.
Como previa a su concierto del sábado 10 de Marzo en la sala Razzmatazz de Barcelona, pudimos conversar un rato con Gorka Urbizu, cantante, guitarra, letrista y miembro fundador de la banda, a quien le agradecemos su tiempo para atendernos. Más fechas de Berri Txarrak aquí:
Entrevista: CARLOS TORRES | Fotografías: BERRI TXARRAK
Empezando por el final, y tras esta gira que os ha llevado hasta China, Corea del Sur, Australia y Nueva Zelanda ¿con qué sensaciones venís y qué es lo que más os ha impactado una vez ya de “vuelta a la realidad”?
La vuelta a la realidad la verdad que ha sido de un buen sopapo. Había sitios en los que ya habíamos estado como China y Corea del Sur, pero estos 17 conciertos han sido como subir un escalón más. Hemos dado en el clavo correcto y no hemos tenido ningún pinchazo en ningún bolo ni nos hemos quedado con esa sensación de “qué hacemos aquí”. De China por ejemplo nos ha impactado la escena emergente punk-rock que tienen. Hemos tocado en Pekín, Chongqing y Wuhan, y lo hemos hecho en unas salas increíbles. Allí hemos visto un movimiento punk-rock efervescente muy potente. Por prejuicio o desconocimiento, vas con una idea preconcebida de cómo está la situación, pero nos encontramos con salas gestionadas por bandas pioneras de punk chino con un nivel muy bueno y con unos equipazos brutales. Hay una escena punk superinteresante.
Y en Australia y Nueva Zelanda ¿cómo os habéis sentido y cómo ha sido la respuesta del público de allí?
Siempre te queda la sensación de que a lo mejor no tienes la plataforma adecuada para mover tu disco en estos lugares, pero la respuesta ha sido muy buena. Salir a tocar al “guiri” no es como empezar de cero, pero sí un poco más complicado de gestionar por el cambio de entorno. Aun así, en general ha ido muy guay y estamos muy contentos.
Creo que la idea de ir allí surgió de Tim McIllrath de Rise Against ¿no?
Sí, surgió de él. Le salieron unas fechas por allí, nos invitó y aprovechamos la oportunidad. Nosotros teníamos en mente ya lo de ir a Australia alguna vez. Queríamos además “rodar” las canciones nuevas en directo y eso que ya teníamos marcados en rojo los bolos de presentación de “Infrasoinuak” de Razzmatazz (Barcelona, 10 de Marzo), el BEC (Bilbao Exhibition Center, Barakaldo, 17 de Marzo) y La Riviera (Madrid, 14 de Abril). Pero estábamos ya con el “gusanillo” de tocarlas.
Se dio la casualidad además que en Auckland (Nueva Zelanda) dabais vuestro concierto número 1000 como banda…
Sabía que llevábamos unos 900 y pico, pero no había hecho el cálculo exacto. Estando en Nueva Zelanda atamos un par de conciertos más y coincidió que el de Auckland daba la suma redonda, si no, habría sido la de Barcelona. Al principio me jodió por no haber coincidido en casa, pero luego pensando me dije: el primer bolo fue en Lekunberri y el 1000 es en las antípodas, el lugar geográfico más alejado de donde nació la banda. Y me gustó esa idea. Al final no es más que un número, pero bueno, tiene su qué (risas).
¿Da un poco de vértigo esa cifra aun así?
No es duro, pero es algo que tienes que ir asimilando. Nos consideramos como una banda activa en constante movimiento y que va ampliando la paleta de sonidos con distintos productores. Yo no la veo a día de hoy como veterana, aunque pensándolo te das cuenta que joder, llevas ya casi 25 años con ella…
En esos casi 25 años habéis pivotado entre directos de salas grandes o escenarios más masivos con los de pequeños locales o salas de asociaciones de aforo mínimo. Estos últimos son homenajeados en la canción “Beude” de vuestro último disco “Infrasoinuak” (Only In Dreams, 2017) que a su vez ha sido homenajeada recientemente por el artista Bàlu Art en su nueva obra. ¿Qué os ha parecido la iniciativa?
Nos ha hecho mucha ilusión, la verdad. Le seguía ya la pista al Bàlu desde la movida de Bill Murray y yo nunca pensé que nuestra canción tendría este homenaje así. En “Beude” quisimos reflejar esa escena de donde procedemos y, aunque luego toquemos en el BEC o entornos más mayoritarios de rock de estadio, al final lo hacemos teniendo en cuenta esa “mochila” que llevas detrás. Y el homenaje que ha hecho Bàlu es muy guay.
¿Procuráis mantener ese espíritu buscando alguna sala pequeña a la hora de enfocar las giras?
Completamente. Por mucho que vayan pasando los años para Berri Txarak, siempre estaremos en deuda con todos esos locales pequeños donde hemos tocado y nos han hecho mejorar a nivel de transmitir con las canciones. Estamos donde estamos gracias a esos movimientos, a la escena que había cuando surgió la banda y a nuestras influencias cercanas. Tenemos que quitarnos un poco de mérito propio y dar importancia a esos circuitos. Fuimos unos que se bajaron de la furgoneta y empezaron a tocar pateando salas y escenarios, que eso parece que hoy en día sea una excepción. Ahora lo que prima desde los medios y que da un poco de rabia es que no se potencia la creatividad, sino a ver quién es el que mejor imita a quién, la competitividad, el tú vales y tú no. Son cosas antimusicales. En vez de potenciar la creatividad, la oportunidad, el fomentar tocar en bolos y patear salas, se potencian otras cosas. Por ejemplo, cuando pasó todo lo del tema del “viral” del concierto de Nantes del año pasado donde tocamos ante solo una persona y nos llamaron de todos los medios, pues bueno, da rabia porque para muchísimas otras bandas todos sus conciertos son como ese. Y en vez de dar voz a esas bandas pues los medios buscan ese titular fácil de “tocando ante solo una persona”. Que nosotros ya lo hemos hecho ante una, ocho o veinte personas cuando hemos ido a tocar al “guiri” y nos da igual, lo damos todo, pero bueno, para otras mil bandas es deprimente.
Hablando ya de vuestro disco “Infrasoinuak”, ¿cómo fue el paso de un disco triple como “Denbora Da Poligrafo Bakarra” (Only In Dreams, 2014), que conmemoraba además el 20 aniversario de la banda, a este?
Pues como te he dicho, somos un grupo muy activo. A pesar de girar y tocar continuamente, estás ya estás pensando en la siguiente pantalla y en cosas nuevas. Es importante también para sentirse vivo creo yo. La pregunta eterna del “¿y ahora qué?” estaba en mayúsculas para nosotros en todo momento, porque veníamos de un disco muy especial como el “Denbora Da Poligrafo Bakarra” que funcionó muy bien, nos abrió un montón de puertas y mucha gente nos descubrió gracias a él. Así que llegado el momento lo que hicimos fue hacer caso a nuestras tripas y a lo que nos pedía el cuerpo que era plantearnos un disco corto, más estándar, no tan ampuloso como el anterior.
Lo habéis grabado junto a Bill Stevensons (Descendents, Black Flag) quien ya os produjo “Xake-Mate Kultural Bat”, el tercer EP del disco triple anterior. ¿Cómo surgió la posibilidad de trabajar de nuevo con él?
Pues la chispa salió de él mismo. En la gira que hicimos por Sudamérica en 2016 con Descendents nos dijo expresamente que quería grabar con nosotros. Fue como “ostia, te está pidiendo el de Black Flag y Descendents que quiere grabarte un disco”. Al principio pensamos que era un calentón de camerino una vez volvimos a casa. Pero le escribimos un mail y contestó diciendo que sí, quería hacerlo y que estaría encantadísimo. Fue el pistoletazo de salida para empezar a componer en serio nuevas canciones.
Es un disco además que cuando lo escucho es como que lo habéis hecho muy a gusto y se nota la buena sintonía con él. ¿Me equivoco?
Así es. Yo por lo menos en general es el disco del que más satisfecho estoy de todos por el resultado y con Bill nos hemos entendido a la perfección.
Y para este año ¿qué planes futuros más inmediatos tenéis?
Ahora mismo estamos centrados en estos tres conciertos de Barcelona, Barakaldo y Madrid. Luego ya en Mayo iremos a Inglaterra e Irlanda en donde se están vendiendo ya entradas y estamos flipando (risas). Y en verano se abre la veda de festivales que algo caerá, aunque aún estamos montando la agenda. Por lo menos este año todavía nos tocará currar más.