Tras una larga espera -más por cómo acabó que por el tiempo transcurrido- esta semana volvía a a las pantallas de medio mundo The Walking Dead, la serie que ha acabado por convertir al zombie en la figura mediática y global que es hoy. Errata Naturae analiza la progresión en los mass media de dicha figura, de su irrupción con Romero al boom en Italia, llegando al monumental éxito de TWD: cómic y serie han logrado un alcance global de primer nivel, que detallamos a continuación. Por ART VANDELAY
Imaginad que sois caminantes y que os vais arrastrando por las calles de Atlanta. Os arden las entrañas con un hambre visceral y cruel.Tenéis las encías como si os las hubiesen rajado con cuchillas. De pronto, oléis algo: ¡carne fresca!
Los que llevábamos tiempo esperando el regreso de The Walking Dead tuvimos cierto consuelo la semana previa con el lanzamiento de TWD: Apocalipsis Zombi Ya, la nueva joya de Errata Naturae centrada en una totémica producción televisiva. Con el lanzamiento del libro dedicado a Juego de Tronos aún reciente, la nueva apuesta de la editorial llega en forma de compendio de textos con el zombi como elemento unificador, un acierto que sirve para tratar la producción emitida en España por FOX, y el cómic que la precedió, desde casi todas sus posibles visiones.
Como apuntan los editores en el texto introductorio, The Walking Dead es hoy mucho más que un cómic referencial, y algo que va más allá de su descomunal audiencia global en todo el mundo. TWD supone de hecho la entrada definitiva del elemento zombi en la cultura popular, un arraigamiento que no se explicaría sin las hazañas de Rick Grimes, Shane y compañía, gracias al talante adictivo de su trama.
Apocalipsis Zombi Ya analiza su irrupción en lo pulp, ayudándonos a comprender los motivos de esa fascinación de entrada incomprensible. ¿Cómo es posible que una serie podrida de contenidos violentos triunfe en un espacio de producción y difusión mainstrean?, se nos plantea de entrada, pregunta que habrá que seguir planteándose en la tercera temporada, visto su poderoso punto de partida.
Más allá de TWD, el libro teoriza sobre el miedo a la muerte, recapitula sobre la evolución del género y recupera, en forma de texto de cierre, el primer zombie de la historia, con ese bonus Z que recoge El Caso del Señor Valdemart, uno de los notables escritos de terror firmados por el gran maestro del género Edgar Allan Poe. Junto a él, ensayos sobre nuestra obsesión por lo zombie -excelente Dave Beickeser– notables relatos cortos como el denso, brillantemente atmosférico texto de Marc Pastor, o hábiles reflexiones sobre el peso de lo emocional en la trama, una brillante disertación ejecutada con acierto por Jorge Gonzalo Cándido, quien teoriza sobre los roles asumidos por los protagonistas principales de la serie.
Junto a ellos, filósofos de peso como Robert Arp o Jeffrey Hinzam enriquecen el texto, del mismo modo que lo hace el brillante capítulo de Julia Round, autora de varios artículos sobre la redifición de la novela gráfica y editora de Studies in Comics, una voz autorizada pues para teorizar sobre lo zombie. «Los zombis están en todas partes, pero ya no nos dan miedo«, nos apunta para arrancar, llevándonos a un repaso vital del género, desde aquellas figuras sobrenaturales creadas en tierras éxoticas a las marchas zombies que se reparten por el globo.
Serie con más asuntos existencialistas de lo que podría parecer en primera instancia, mantener o no el orden de las cosas pivota en la relación de algunos personajes, sobre todo en la segunda temporada, el libro se nutre de tales consideraciones, enfrentándonos a nuestros miedos y reflexionando sobre lo absurdo de un mundo, el zombi, que tal vez no nos sea tan ajeno como lo que querríamos. «¡Nosotros somos los muertes vivientes!«, exclamaba uno de los personajes principales en el cómic, metáfora al fin aplicable
Western apocalíptico de primer orden, la nueva apuesta de Errata Nataurae enganchará a los fans de TWD, aunque se puede disfrutar, y mucho, desde una perspectiva ajena a la trama -algunas de las reflexiones trascienden de la trama, como la serie lo hace del género del que parte-, alcanzando pasajes notables como aquel en el que Gordon Hawkes nos traslada a la cosmovisión zombie. «Imaginad que sois caminantes y os vais arrastrando por las calles de Atlanta«, nos evoca casi al final de su texto.
Con esa imagen de zozobra lo dejamos. Lectura más que recomendable que sigue la estela de otros títulos de la editorial, como los dedicados a Juegos de Tronos y The Wire.