La jornada de ayer nos dejó la triste noticia de la desaparición de Carey Lander, teclista de Camera Obscura, víctima de una extraña forma de cáncer en los huesos conocida como osteosarcoma. La noticia fue confirmada por los integrantes de la banda a través de un comunicado en sus redes sociales, animando a los seguidores del grupo a seguir realizando donaciones a JustGiving, plataforma con la que se ha reunido la cantidad de 60.000 libras esterlinas, dedicadas a la investigación y la lucha contra la dolencia que se ha llevado a Lander.
A la teclista de Camera Obscura, banda que canceló el pasado verano todos los conciertos que tenían programados para que Lander pudiese centrarse en el tratamiento, le diagnosticaron su enfermedad en 2011, iniciando entonces una lucha contra la fatalidad que le llevó a abrir la fundación para fomentar la investigación contra esta enfermedad, con el objetivo que, con el tiempo, deje de ser la enfermedad terminal que ha terminado por acabar con su vida casi cuatro años después de empezar su lucha.
Pese a la dureza de la enfermedad, Lander aprovechó los períodos en los que pudo llevar una vida normal para acabar de grabar el disco en el que empezaron a trabajar antes del diagnóstico. Desire Lines fue editado por 4AD en junio de 2013.