Tras varios avisos, podemos decir que con Mount Disappointment FOOLATV (Falling Out Of Love At This Volume) lo han conseguido. Su nuevo LP, al que llegamos ahce apenas unos días, después de que se editase el pasado mes de Julio, funciona como compendio de los distintos destellos presentados anteriormente apuntando, tal vez, que su momento llega ya. Por RUBÉN IZQUIERDO
- Equilibrado, punzante y trepidante, Mount Disappointment consagra la propuesta de FOOLATV, llevándola un paso más allá de lo intuido en sus últimas referencias
- Vídeos VHS, espíritu lo-fi y hits frenéticos, sus avales para consolidar su sonido y su puesta en escena
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No abundan las referencias de FOOLATV en la red -aunque no por ello son un grupo invisible en Internet, pudiéndose disfrutar parte de su discografía en Bandcamp o en la web de Villains Records– y está bien que sea así. En tiempos en los que prácticamente podemos destilar la biografía entera de un grupo antes de su mismo debut, perdiéndonos así el efecto sorpresa de antaño, está muy bien llegar a un grupo manteniendo el halo de la sorpresa, el gusto a descubrir lo desconocido, en este caso con el añadido de que el grupo toma como nombre uno de los primeros temas de Bright Eyes.
Anécdotas al margen, llegamos a Falling Out Of Love At This Volume fascinados por la portada de su último álbum, y a partir de ahí todo para arriba. Triunfo absoluto para esta banda procedente de Wokin, Surrey, que trabajan en su estudio casero, desde han concebido un álbum que encaja como anilo al dedo a un lo-fi garajero adictivo, presentado en fomato cuarteto en este excelente LP, una pequeña joya oculta -su incidencia en la red debería ser mayor- que engancha desde los primeros acordes de Drunken sailor, tema de apertura con el que comenzamos a entrar en su sonido, con influencias garage, grungegaze -etiqueta puesta por ellos mismos en su bandcamp, sutil descripción de lo aquí encontrado- que destaca para bien en el fondo, sus temas, y la forma, ese espíritu DIY que parece apoderarse de su universo creativo, convirtiéndolos en una de las formaciones independientes a seguir.
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Tras debutar con par de temas en formato acústico -modo en el que no desentonan tal y como puede comprobarse en el videoclip disponible sobre estas líneas, su Mount Dissapointment es algo más que una carta de presentación, y sirve para consolidar lo practicado por Alec Hugill, Mat Peachey, Toby Noto y Dan Oswin, de quienes también disfrutamos un notable split junto a Debris Harry, disponible aquí, poco antes de que editasen Falling Out, también en formato LP.
Con todo, el álbum -cuyos distintos tipos de portada DIY pueden disfrutarse sobre estas líneas- se adivina equilibrado y adictivo. Lo es es un pasajes más emotivos, She was a good kisser invita al coro en grito, cerveza en mano- y en sus instantes más felices, como Drunken sailor o la vitamínica Love is fading, uno de sus mejores temas… con permiso de Crippled hand o la conclusiva If I ever let you down, cierre situado después de la también enérgica Imaginary women, confirmando de camino que aquí hay materia prima lo sufientemente importante como para hablar de disco solido, retales de algo grande tejido a partir de letras directas, pequeños punchs que dejan huella y que hacen de su propuesta un (necesario) nombre a seguir.