En la carrera tuve un profesor en Redacción que causaba cierto pánico entre el alumnado. Sus correciones eran implacables, marcando en colores sobre el word aquellas frases que merecían una corrección, acompañándolas siempre de frases (divertidamente) lapidarias que nos indicaba lo muy lejos que estábamos de la crónica perfecta. Por RUBÉN IZQUIERDO
«Es demasiado amarillista, incluso para usted«, me indicó un día. «Muy edulcorado«, apuntó a la siguiente, cuando rebaje el tono de la ironía. «Hay más texto marcado en color que en blanco, reflexione«, apuntó una jornada en la que, me temo, no estuve especialmente inspirado. Me pregunto como quedaría corregido por el profesor que, por otra parte, más me enseñó en los ya lejanos días de Periodismo, el texto que tenía pensado escribir una vez leí ayer lo que ahora nos ocupa
A estas alturas no explicamos ninguna novedad si apuntamos que, casi con toda probabilidad, la edición de este curso del Primavera Club en Barcelona-el lunes vamos con el especial, por cierto- será, la última. La concatenación de desdichas que ha acumulado la organización en los últimos meses ha sido la puntilla, un cúmulo de desgracias que arrancó con la deplorable subida del IVA y que siguió con la cancelación del concierto de CAT Power. Entre medio, otro nombre potente que se caía (Crocodiles) y mas sal sobre heridas variadas en forma de cierre de salas, pérdida de escenarios y una sufrida contrarreloj para reubircarlo todo.
Semejante cadena de desdichas dan para la supresión y más. Sumidos en la cultura de pandereta que nos rodea parece ya sin remedio, el canto de cisne de la presente edición del Primavera Club deja un panorama cuanto menos preocupante, sobre todo si tenemos en cuenta que una de las consecuencias más o menos directas que se aventuraban en el disparate del famoso 21% era la pérdida de competividad por parte de las promotoras a la hora de traer de gira a grupos internacionales de clase medio (alta). Convertido con los años en una suerte de oasis -el nivel de programación de los últimos años era de notable alto- queda por ver como se llena el vacío el año que viene en caso de que se confirme el adiós, una despedida que no implicaría necesitariamente el fin del Primavera Club como cita con sede en Barcelona, sino que comportaría su cambio de ubicación-«la experencia en Guimarães ha sido extraordinaria«, apunta Gabi Ruiz en el post de Primaverasound.wordpress.com donde reflexiona en voz alta sobre el adiós a Barcelona-.
Resulta inconcebible que una ciudad como Barcelona dé la espalda a una cita como la del Primavera Club hasta provocar el hartazgo de la organización. Barcelona pierde un acontecimiento cultural de primer nivel, situado además en la cresta de la ola
El propio Gabi señala en el mismo post que la organización se está planteado seriamente recuperar «viejas ofertas» y llevar el evento a otras ciudades «más receptivas«, algo lógico si se tiene en consideración que el Festival goza de un estado de salud intacto como lo demostró el sold out a varios meses vista del año pasado o el casi lleno que llevamos esta temporada, a pesar de todos los pesares y con el mérito añadido de haber sorteado las siete plagas en el camino.
Resulta inconcebible que una ciudad como Barcelona dé la espalda a un Festival de estas características. Por prestigio -pocas marcas están tan consolidadas y ligadas a la ciudad como la del Primavera Sound, y sirva como ejemplo la amplísima representación extranjera que la edición veraniega trae consigo cada edición- y por posicionamiento de mercado es cuanto menos chocante que una ciudad presuntamente cosmpolita como Barcelona (lo mismo vale para Madrid) deje escapar un Festival consolidado, autosuficiente a la hora de venderse al mundo y capaz de situar a la ciudad en el foco de la cultura internacional durante dos fechas bien diferenciadas (una por semestre) como las del Primavera Sound y el Primavera Club.
Con la crisis habiéndose cobrado ya algunas víctimas en materia de difusión cultural en la ciudad, el reciente cierre provisional de la Sala Apolo -la poca sensibilidad del consistorio en el modo de llevar a cabo el cierre cautelar daría para otro post- y el canto de cisne de diferentes promotoras. Que el anuncio llegase el mismo día en el que la organización del Faraday confirmase que la décima edición de su Festival será la última no ayuda a que mantengamos un mínimo de optimismo.
¿Estamos hasta el fin de la Barcelona cultural que se ha sostenido con punto de milagro los últimos años?. Demasiado amarillista, incluso para mí. ¿Debemos dar acabado el sueño de la Barcelona musical? No pequemos de edulcoramiento. Quizá convenga abstraerse de todo, obviar los (variados) matices de color que tendría cualquier pensamiento sobre el duro momento que estamos viviendo y volver a centrarnos en la Música. El jueves arranca el Festival y tocará disfrutarlo, aunque el miércoles habrá espacio para una última reflexión, gracias a las conferencias programadas por Primavera Pro centradas en el el estado de la música en directo. Info y programación aquí
BARCELONA – Miércoles 5 de diciembre en el CCCB
18:30 El estado de la música en directo en Barcelona
Con Carles Sala (ICUB), Roger Roca (TV3, El Periódico, Rockdelux), Mireia Madroñero (Sones), Roberto Tierz (Sidecar), Carles Conesa (Sala Apolo, BAM), Borja Rosal (Extraperlo, Canada)
19:45 Circuitos internacionales de música en vivo
Con Alberto Guijarro (Primavera Sound, Sala Apolo), Marisol López (ICEC), Circuito Fora do Eixo (Brasil), Mireia Madroñero (Sones), Borja Rosal (El Guincho, Extraperlo, Canada)
MADRID – Viernes 7 de diciembre en Matadero Madrid (El Taller – frente a La Cineteca)
11:00 Reunión IMO (a puerta cerrada)
18:00 El estado de la música en directo en Madrid
Con David Saavedra (Rockdelux), Armando Ruah (ACCES, Girando por Salas), Nacho Gallego (Universidad Carlos III de Madrid), Eduardo García (Giradiscos/ Lugger), David Novaes (Siroco), Raúl Alonso (La Fonoteca)
19:30 Circuitos internacionales de música en vivo
Con Almudena Heredero (PrimaveraPro, Followspot), Jorge García (Los Punsetes), Miguel Ángel García Garrido (Gig’n’tik), Circuito Fora do Eixo (Brasil), Sebastián Vera (UFI)
Entrada libre hasta completar aforo