En este momento de efervescencia de lo que se considera ‘indie’, etiqueta que nació para definir aquellas artes que se desmarcaban de las principales corrientes estilísticas o a los artistas que no contaban con el apoyo de las grandes marcas distribuidoras del ámbito cultural, pero que mutó en una palabra para definir todo lo que rodea a una nueva tribu urbana.
Indie ahora son unos gustos musicales, una manera de vestir o incluso un estilo de vida, protagonizado por el concierto como epicentro de la vida social… Y también una nueva manera de abrir mercado para algunos que se autodenominan indie. Desde el mundo editorial, han demostrado tener un buen olfato y ya son varias las iniciativas que han aparecido este año. La fórmula: Aprovechar el boom de lo indie y explotarlo en formato libro.Por PICOTT GIRL.
Lo indie vende. Todo el mundo quiere ser indie -paradoja num. 1-. Y qué mejor para un momento delicadísimo para el mercado editorial que aprovechar el tirón de algo que muchos mortales desean. Uno de los pioneros aquí fue el libro que salió a la venta en el primer trimestre de 2012. Se trata de Ara és el moment. Breu crònica dels indis catalans. Escrito por Martí Sales, humanista contemporáneo, autor de Huckleberry Finn (Ed. Moll, 2005) y líder de la banda Els Surfing Sirles, consiste en una selección de diez entrevistas a diez personajes relevantes dentro del panorama musical independiente en Catalunya, principalmente en Barcelona.
Entre los protagonistas de estas entrevistas encontramos a Jordi Llansamà, fundador del sello BCore, David Carabén, cantante de Mishima o Anna Cerdà, creadora del festival PopArb. Mediante las narraciones de cada uno de los personajes entrevistados, se va hilando una red que podria ser un árbol genealógico de lo que es actualmente el indie catalán. Como bien dice el libro, ahora es el momento de muchas historias que empezaron hace más de una década pero cuya eclosión ha sido hace menos de dos. Es el momento, sin duda, de aprovechar el interés despertado.
Otra de las propuestas surgidas en España tiene también vocación didáctica pero utilizando la música indie para combinarla con recetas de cocina. Se trata de Cocina Indie. Recetas, dibujos y discos para gente diferente. Escrito por Mario Suárez y con ilustraciones de uno de los dibujantes de moda del momento, Ricardo Cavolo, el libro presenta las recetas de noventa platos, si sumamos entrantes (EP), platos principales (LP) o postres (Singles), mezclando el lenguaje típico de una receta de cocina con el lenguaje musical.
De este modo, encontramos recetas como Souflé de macarrones para después de la resaca, que recomiendan preparar con Don’t want to sleep de la banda islandesa FM Belfast, o el plato ideal para el álbum de Sufjan Stevens, The age of Adz: un conejo estofado a lo folk.
Todas las recetas presentan la misma estructura: Un título que juega con el plato y con el disco con el que se ha maridado, los ingredientes necesarios, los pasos a seguir para la elaboración del plato, mezclados con un poco de historia del álbum o artista protagonista de la receta, y siempre una Cara B en la que se ofrecen consejos para completar la receta como por ejemplo qué bebida escoger para acompañar al plato, o los tiempos de preparación.
Ideal para mitómanos del indie, ya que los encontrarán a todos, desde Lori Meyers hasta Björk, pasando por Franz Ferdinand, Sonic Youth o Dum Dum Girls. Las recetas son sencillas y atractivas, merece la pena intentar poner el disco… y esperar que el espíritu del indie nos ayude a ser mejores cocineros… Cuestión de fe.
Otros impulsores del indie para ganar dinero, en su caso para fines benéficos, fueron Matt Scotland y Casey Cohen, amantes del indie rock y del arte que ya en 2006 aprovecharon la incipiente eclosión de la música indie en su paispara crear el Yellow Bird Project, que nació con el objetivo de conseguir que jóvenes diseñadores crearan ilustraciones inspiradas en canciones de bandas indie, cuyos beneficios serían dirigidos a causas solidarias.
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Pero con los años, de la camiseta pasaron al papel. Su última publicación fue un libro de pósters suculento para gruppies: Se titula The Indie Rock Poster Book e incluye ilustraciones inspiradas en canciones de Bon Iver, Devendra Banhart, Andrew Bird o Of Montreal, entre otros, que se pueden colgar por separado, conviertiendo un hogar en un mausoleo indie.
En Yellow Bird Project también piensan en los más pequeños y en sus necesidades indie. Su primera publicación en formato libro fue el The Indie Rock Coloring Book, en el que se encuentran, por ejemplo, una barba de Devendra Banhart dibujada en blanco y negro, lista para ser coloreada.
Estas son solo cuatro de las propuestas que han aparecido directamente realionadas con bandas de la escena local o internacional, y seguro que habrá más. El filón del indie deberá ser explotado. Quién sabe, podría contribuir a una tímida mejora en el mundo del papel para lo más nostálgicos… Y además, en la era del eBook, un libro es muy indie.
La imagen de cabecera es de Yellow Bird Project