La música de Mi and L’Au parece vivir suspendida en el aire. La sostiene la fragilidad de un suspiro, el susurro cálido de un folk minimalista impulsado por dos almas. La de la exmodelo finlandesa Mira Romanschuk (voz) y la del compositor galo Laurent Leclère. El resultado, puro gozo ensoñador. Por RUBÉN IZQUIERDO
Mi and L’Au acaba de sacar al mercado su nuevo disco. If Beautiy Is A Crime mantiene las constantes vitales de un dúo que reduce el folk minimal en el que se desenvuelven a su última expresión. Arropan su nuevo trabajo en una marisma de cuerdas y pianos que los anteriores, su ópera prima llegó en 2005, con la publicación de su disco homónimo, haciéndonos caer en una ensoñación que a veces se dibuja eléctrica, casi siempre bucólica, revelada entre melodías inquietantes y adictivas, un trabajo artesanal al que conviene entregarse con el estado anímico ideal. Si no se ha escuchado previamente, vale la pena reservar la primera escucha a una tarde fría o gris, empaparse de su nostalgia, abrazarse a ella. El acompañamiento resulta ideal.
[youtube id=»9tlYMbghfcY» width=»600″ height=»350″]
La formación de Mi and L’Au, su intrahistoria particular, daría para un film nouvelle vague. Mira Romantchuk, emergente modelo finlandesa, se muda a París para relanzar su carrera internacional. Allí conoce a Laurent Leclère, autor de varias bandas sonoras. Se enamoran, se casan y empiezan a trabajar juntos. Las pequeñas joyas acústicas -la incidencia sonora se reduce a la mínima expresión- son el resultado de su feliz asociación. Pero hay más.
Laurent y Mi, en una imagen de archivo // Young God Records
Hay más porque a Mira y Laurent, protagonistas ya de su propia historia, se cansan de París y se instalan en Finlandia. Podían haber tirado por la vía cómoda e instalarse en Helsinki, pero Mira y Laurent son de otra pasta. Se instalan en una cabaña remota, perdida en el bosque, y empiezan a componer. Como Bon Iver, pero sin su desasiego vital. Como Tennis, pero sin su bote y el mar, la alegría del océano recién descubierto. El resultado es el primer disco ya como dúo, un trabajo hermoso trufado de guitarras, violines y algún instrumento de juguete. Como Maia Vidal, pero con la influencia del bosque y el frío, copos de nieve suspendidos en la naturaleza salvaje, la misma que da a su sonido una pátina especial. La ensoñación. Esas cosas.
Completado el disco, la pareja se instala en Valencia, donde vive ahora y desde donde han preparado su nuevo disco, el tercero después del citado trabajo homónimo y de Good Morning Jokers, puesto a la venta en 2009 instalados ya en la Comunidad Valenciana, del que rescatamos Up In The Building.
[youtube id=»iyBGv60oN-A» width=»600″ height=»350″]
Mira, Mi, confiere a la música que insufla vida a los trabajos publicados hasta la fecha por el dúo un sentido especial. Su primer trabajo salió a la venta en 2005, aunque su consolidación ha tardado en llegar. Tampoco han demostrado tener mucha prisa, por lo que lo que venga ahora con su nuevo trabajo es un regalo. No tanto hacia ellos, sino hacia nosotros.
If Beauty Is A Crime supone el regreso al primer plano de la actualidad de Mira y Laurent. Mantiene, decíamos, la sencillez de su propuesta, despojada de nuevo de cualquier tipo de adorno más allá del estrictamente necesario.
Mi and L’Au actúan el próximo 21 de Febrero en Heliogàbal.