Imagen promocional del cuarteto, cedido por la banda | Fotografía de Ari Tesouro
Vuelve Zinc es fuerza y sentimiento, advierte el cuarteto en sus notas promocionales. Y es ira contenida, prosiguen antes de señalar ese “día en el que despiertas sintiendo que es el día perfecto para mandarlo todo al carajo y empezar de nuevo”, concluyen con cierto sentido poético, sentando de paso las bases para su aventura musical.
Una aventura que reúne a músicos de diferentes procedencias y formaciones, y que lo hace creando un espacio común para desarrollar sus primeros temas juntos. Pol Ploman y Ricky Rius comparten otro proyecto musical de continúa ascendencia (Bolga), Chisco Sanchís proviene de Galicia y pasó previamente por Membrillo Fanegas y Habitación 92, y André Maia es portugués y cierra la cuadratura del círculo, remachada en el EP Un Mundo Sin Zinc (Autoeditado, 2017) que publicaron a finales del año pasado, poniendo la guinda a un curso intenso, en el que lanzaron diferentes singles.
Con su primer EP en la calle, 2018 se adivina como el año de su confirmación, el de tomar las decisiones que deberían marcar el camino a seguir del proyecto. Charlamos con ellos para saber más de la evolución de su proyecto.
Entrevista: R. IZQUIERDO | Fotografías de ARI TESOURO cedidas por VUELVE ZINC
El grupo se forma en 2016. Empezando por el principio, ¿cómo y cuándo surge la banda?
Nos encontramos Pol y Chisco por las redes sociales. No nos conocíamos pero se compartían inquietudes y quedamos para hablar de lo que nos unía. La idea empezó siendo la de un dúo tirando de loopstation, guitarra y sinte de Chisco pero se nos fue de las manos: se unieron André al sinte y Ricky al bajo en forma de pegamento e ideas.
Venís de Galicia, Portugal y Barcelona, aunque juraría que todos vivís aquí. ¿Qué rutina lleváis como banda?
Vivimos todos en Barcelona. André lleva aquí diez años y Chisco la mitad. Pol y Ricky son del barrio. Como banda intentamos vernos tres veces a la semana aunque por trabajo es bastante jodido cumplirlo… Normalmente Chisco plantea cosas, Pol le da una vuelta y luego los cuatro juntos le damos forma. Las canciones están en constante evolución. Intentamos tenerlo todo transcrito e informatizado para poder tener una referencia y desarrollo de los temas.
El año pasado hicisteis una pequeña gira por Galicia, supongo que aprovechando esos lazos familiaries. ¿Mantenéis contactos con grupos de la zona? ¿Qué es lo que más valoráis en ese tipo de giras?
Lo de Galicia moló mucho. Fuimos con BOLGA y lo pasamos teta. Incluso nos acompañaron un grupo de amigos desde Barcelona aprovechando la excusa para hacer turismo. Perdimos pasta pero comimos de lujo. Nos trataron muy bien en las salas que tocamos. En La Fábrica tocamos para cinco personas porque esa noche tocaba BALA en La Iguana y jugaba el Celta. Estuvimos a punto de ir a ver a BALA. Al final tocamos y fue una experiencia brutal, creemos que es la mejor sala con el mejor sonido que hayamos tocado. Al día siguiente tocamos en la Mardi de Coruña y estuvo genial, es una sala con mucha solera y vino bastante gente al bolo. Esa noche y la siguiente la compartimos con ESPOSA que son un amor y tienen un directo cojonudo. La última noche fue en la ciudad de Ferrolgrado, en Cuerda Floja, en casa, por lo menos para Chisco y creemos que para todos porque ya fuese por el relax de la última noche o por el café, se nos fue de las manos, en el buen sentido de la palabra. Respondiendo a la pregunta, hacer este tipo de giras ayuda a conocernos y a sacarnos de nuestra zona de confort empujándonos a seguir aprendiendo. La conexión con Galicia está siempre presente y queremos que así siga. Allí hay una escena increíble. Hay bandas que nos gustaría traer como Turbo Kraks, Membrillo Fanegas,… y bandas que queremos que vuelvan como Monstruo, Holywater…
Algunos de vosotros compartís otros proyectos, como Bolga. ¿Cómo se lleva el estar en dos bandas en línea ascendente a la vez?
Pues la verdad es que en época de conciertos con los dos grupos es bastante loco. A Pol se le terminan cruzando conciertos, y creyendo que tiene un bolo con Zinc, que realmente tiene con Bolga. Eso no quiere decir que no valore el hecho de tocar con una banda o con otra en un sitio; pero es una actividad de riesgo la de tener varios grupos en activo. De adolescentes se podía llevar con más normalidad, pero en la actualidad con más responsabilidades termina siendo una actividad bastante intensa, que nos gusta mucho por un lado, pero también pide de mucha implicación. Aun así son dos proyectos formados en su mayoría por gente distinta, energías distintas y enfoques distintos; entonces esto lo hace mucho más llevadero, porqué resulta novedoso en comparación a los dos grupos.
¿Y qué importancia le dais a esa fuerza añadida que te da el formar parte de un mismo colectivo?
Creemos que es algo más fraternal que otra cosa. Los grupos nos ayudamos entre nosotros y nos pasamos contactos, nos decimos lo que creemos francamente de lo que hacemos y si nos gusta o no. Pero lo bueno, es que hay distintos gustos y distintas influencias dentro de este colectivo; pero al fin y al cabo a todos nos gusta hacer música, y sobretodo preocuparnos por sus detalles, por su planteamiento, por lo que transmite en sí… Y quizás son estilos distintos pero en el fondo hay una forma de hacer música, que tiene más que ver con la implicación que tenemos todos con nuestros grupos que no por nuestras influencias. El pertenecer a algo así es la hostia, no paras de aprender de los demás y la sinergia que se forma te impulsa a seguir componiendo. Pero esto no debería ser exclusivo. Por decirlo de alguna manera, todos deberíamos de pertenecer a un mismo colectivo. Nos gusta compartir escenario con bandas sin importar el estilo, nos importa el mensaje y el sentimiento que les mueve a hacer su música. No hay nada como tocar de primeros y luego disfrutar relajados viendo a bandas que nos gustan.
Fruto de esas colaboraciones se explica también la producción de Adrià Marva (Gyoza) en el EP. ¿Qué podéis contarnos de la grabación de los tres temas?
Adrià Marva es un currante y tiene el duende del rock. Está genial trabajar con él porque es muy exigente y con el látigo saca lo mejor de tí pero lo puedes mandar a la mierda si se pasa porque hay confianza. La primera vez que grabamos, Chisco se quedó afónico y de hecho, en ‘’Cabeza y Alter Ego’’ la voz está en las últimas y eso le daba un rollito, según palabras de Marva. Por lo general, siempre hablamos de Marva para la producción y es cierto, pero hay un tándem ahí formado por él y por Pol, ya que la mayoría del equipo que usamos para grabar es de Pol. Él también está grabando a grupos y todos solemos partir de los mismos medios. Ahí el tema de la autoedición empieza a notarse, la semana tiene siete días y somos muchos los grupos que ensayamos en el mismo local, que a su vez es donde grabamos y la mayoría de nosotros solo podemos ensayar por la tarde… hubo un par de días que no pudimos grabar nada porque la tarjeta de sonido de Marva se reiniciaba cada 30 segundos de grabación. Un jaleo. Pero tampoco es un drama, lo bueno es que el tener menos medios te obliga a dar siempre algo más. Y si te viniese todo dado probablemente no lo harías.
Vuelve Zinc, de estreno a finales del pasado curso
Cuando se estrenó el EP en la Mondo en las notas que acompañaron el lanzamiento se apuntaba el sonido 90’s de algunos pasajes. ¿Estáis de acuerdo? ¿Es musicalmente una década importante para vosotros?
Creemos que el nexo de unión está en esa década. Cada uno venimos de un palo diferente, pero lo que nos une bebe de ese momento. Evitamos ponernos etiquetas. Nos gusta pensar que tenemos un pensamiento ecléctico. A la hora de componer no pensamos en imitar un estilo u otro, pero las referencias son las que son. Se nos pone dura tanto con Jeff Buckley, Fugazi, Mogwai o como con Camarón.
Vuelve Zinc “es fuerza y sentimiento”, apuntáis en Bandcamp. ¿Os consideráis una banda emocional?
Somos unos venas. Ira contenida. Solo hay que leer entre líneas. Nuestra música la creamos en base a nuestra frustración. A las ganas de cambio. Es algo constante, lidiar con ello nos hace querer evolucionar en todo momento y hay momentos en los que alguien de los cuatro tiene que ponerse sensato y pararnos los pies, porque podríamos estar cambiando el set list cada dos semanas. De hecho, hemos empezado el año replanteando el modo de componer e interpretar los temas actuales y los venideros… así que habrá novedades.
En Spoty tenéis algunas de vuestras canciones previas, como ‘Cabeza’ y ‘Alter Ego’, también de 2017. ¿Fue una decisión premeditada separar los temas aunque sean del mismo año? ¿Qué tienen las canciones del EP para dar forma a un EP, a diferencia de las anteriores, presentadas como simple?
En un inicio la idea era sacar en Abril un EP llamado ‘’Un Mundo Sin Zinc’’ y en Junio sacar ‘’Un Mundo Con Zinc’’. Como dos bloques temáticos para la presentación de la banda, buscando un poco la versatilidad. Pero se nos fue de las manos la gestión del tiempo. ¿Lo de sacar tres singles? totalmente circunstancial, en su día publicamos en la misma semana las tres canciones, cada una con su portada obra de Ari Tesouro y Nuria Moar. Luego las subimos a las redes de esa manera porque nos parecía un buen trabajo el arte hecho por ellas.
En 2017 también aparecen ‘Verano En’ y ‘Faquir’, cronológicamente vuestras primeras canciones finalizadas. ¿Qué podéis contarnos de vuestro set actual?
Las seis canciones han estado en nuestro set list desde el principio. Podríamos hacer otro EP con otros tres temas que probablemente pareciesen una evolución de estos ya publicados, pero es que creemos que tenemos un directo variado, bastante ecléctico, quizás fruto de nuestros diferentes gustos musicales o tal vez por la frustración de la que hablábamos antes, por la necesidad de cambiar y no casarse con un estilo en concreto. Puede parecer un tópico pero sinceramente no nos gusta que nos etiqueten, aunque entendemos que es normal hacerlo. Además en directo tenemos un sonido mucho más sucio con el que nos sentimos muy a gusto y puede que escuchándonos en spotify no llegues a pensar eso.
Un tópico para acabar. ¿Planes inmediatos de futuro?
Fin de año ha dado que pensar. El tener un poco más de tiempo libre para pensar nos ha ayudado a plantearnos si este es el camino bueno. Y como ya te adelantamos antes, no sabemos si lo es o no, pero lo que tenemos claro es que queremos volver a la idea original de Pol y Chisco: más loop, ritmos más complejos y más profundidad, pero sobre todo sin perder la espontaneidad. Lo que seguro que queremos ahora es hacer lo que realmente nos gusta y es algo que estamos buscando.