San Jerónimo están de vuelta, y lo hacen de la mano de WeAreWolves Records, sello con el que lanzarán El Sur, la colección de canciones grabadas y mezcladas por José A. Pérez (de I Am Dive, con quien charlamos hace unos meses) con la que darán continuidad a aquel Salinas 20:15 con el que se dieron a conocer el año pasado. Hasta la fecha el dúo asturiano ha adelantado dos temas, ‘Mapas infinitos‘ y la reciente ‘El verano era ella‘, dos píldoras elegantes que recomendamos desde ya.

En su vuelta, al menos en las canciones que hemos podido disfrutar hasta la fecha,  repiten apuesta por el formato físico y amplían sus horizontes referenciales, tal y como se subraya en las notas promocionales de los dos singles que han avanzado hasta el momento. Ecos de los primeros Beach House, una mayor incidencia de los sonidos electrónicos y una decidida apuesta por reforzar la vía evocadora y emotiva que tan bien funcionó en su carta de presentación se dan cita aquí, en una vuelta que llega con la tranquilidad de haber abierto camino con su trabajo anterior. De los dos adelantos que hemos podido disfrutar hasta la fecha, ‘Mapas infinitos‘ cuenta con videoclip propio, firmado por Pablo Ruiz, que dejamos disponible bajo estas líneas.

WeAreWolves Records anunciarán en breve la salida física del álbum. ¡Ganas de que llegue ya!

Texto: R. IZQUIERDO | Fotografías cedidas por WeAreWolves Records.

Uno de los primeros adelantos del disco es ‘El verano era ella’.  En las notas comentabáis esto: “Nos hemos dejado empapar por el downtempo, la electrónica y el neo-soul, pero aún hay algo de melancolía de la nuestra en todo este asunto. Esperamos que os guste”.  ¿Hasta dónde llegarán esos cambios en el disco?

Aunque en este nuevo album hemos apostado por una renovación en el sonido y en las referencias (como bien apuntas hay tintes más electrónicos y de neo-soul en algunas composiciones), hay otras muy fieles a nuestro primer trabajo. Habrá un mega-mix para todos los gustos, pero en líneas generales sí que hemos dado un giro al sonido.

Que se mantenga ese toque “melancólico” supone de hecho el mantener una de las características principales de vuestro sonido. ¿Cómo empezó el proyecto? ¿Partistéis de alguna premisa clara?

El proyecto comenzó en 2014. María empezó a hacer canciones en casa y se las enseñó a Nacho, el cual la ayudó a terminar de arreglarlas y componerlas. No había ninguna premisa, de hecho, creo que nuestra premisa era precisamente no tenerla. Ambos dos veníamos de tocar en grupos anteriores donde los patrones estaban más definidos y en San Jerónimo queríamos explorar y hacer la música que nos apetecía en cada momento.

San Jerónimo, en una imagen promocional | Fotografía de Siro García

Siguiendo por ahí, ¿representa para vosotros vuestro sonido un estado de ánimo? ‘Mapas infinitos’ la escuché por ejemplo en pleno cambio de trabajo y me situó en estado anímico muy concreto, que creo que le queda bien al tema.

Sí, creemos que nuestras canciones representan un estado emocional concreto, así como también un lugar físico y un momento. Nos gusta pensar que cada canción dibuja un sentimiento o un estado de ánimo, pero siempre dejando libertad al oyente.

En ‘Mapas Infinitos’ hay pequeños picos emocionales: el tema acaba muy arriba pero mantiene un toque delicado. ¿Cómo trabajáis esos contrastes?

Nuestras canciones siguen patrones bastante sencillos que nos gusta ir desarrollando y creando capas. No nos gusta trabajar con formas complejas, así que intentamos jugar con las intensidades en nuestra música, para evitar que se conviertan en algo demasiado plano.

Me ha llamado la atención la línea visual de los dos singles, con la piscina y demás. ¿Os consideráis un grupo detallista en lo visual? ¿Qué podéis contarme de esta decisión en concreto?

Sí, la parte visual tiene un gran peso en el proyecto. Nos gusta cuidar esos detalles y el cine nos influye en sobremanera a la hora de componer, así que sí que nos consideramos rotundamente detallistas en lo visual.

¿Y cómo trabajáis la línea visual del grupo en sí? En ‘Mapas infinitos’ presentáis videoclip

El videoclip es una idea original de Esteban Ruiz (Wearewolves Records) y Pablo Ruiz. Esteban nos retrató un poco lo que tenía en mente y enseguida nos encajó con la canción y con nuestras expectativas. El video fue grabado por Pablo en Asturias a principios de febrero. Aparece nuestro pueblo Salinas y algunos otros pueblos del interior de Asturias. Queríamos enfrentar mar y montaña paralelamente a unas escenas de chico-chica deambulando en esos paisajes. Respecto a nuestra línea visual nos sentimos muy cómodos trabajando con “La Casa junto al Mar” (Guille Pando) que grabó nuestro anterior videoclip y nuestras proyecciones para los directos, y con Siro García (Sirographics), que se encarga de las fotos promocionales y artwork del grupo.

Esta es vuestra primera colaboración con WeAreWolvesRecords. ¿Cómo llegáis al sello?

No es la primera, ya que nuestro anterior trabajo “Salinas, 20:15” ya fue editado y publicado por Wearewolves Records. Llegamos al sello a través de I am Dive. Éramos (y somos) muy fans del grupo y organizamos en 2015 un concierto en Oviedo para ellos, en el que les teloneamos. Ahí surgió una relación de amistad que se fue convirtiendo en profesional, ya que fueron los primeros en apostar por nuestro proyecto.

La edición será de nuevo en vinilo, como en vuestro trabajo anterior. ¿Qué importancia le dais al formato físico? ¿Y cómo veis la tendencia actual que parece ir asentándose de apostar más por el single a discos completos?

Estamos enamorados del formato físico, así que no podríamos publicar el disco sin su correspondiente vinilo o cd. Cuidamos mucho la línea visual y creemos que es necesario plasmarla en un formato físico para que todo vaya en línea. Hoy en día se venden pocos discos y quizás sea más fácil apostar por pequeñas colecciones de canciones. Vivimos en una época en la que cuesta tener tiempo para sentarse a escuchar un disco completo, así que por eso creemos que hay una oleada de lanzamiento de singles. Nosotros de momento, seguiremos apostando por formatos largos.

Edición en vinilo de ‘Salinas 20:15’ | San Jerónimo

Hablando de la grabación propiamente dicha, ésta la firmáis con José. A Pérez, miembro a su vez de I Am Dive, una de las bandas próximas al sello. ¿Cómo fue la grabación con él? ¿Variaron mucho las canciones respecto al material que veniáis trabajando?

La grabación con Jose A. Perez fue muy intensa y a la vez muy enriquecedora. Grabamos once temas en seis días, lo que supuso un reto para nosotros, ya que el anterior disco había sido grabado en casa sin ningún deadline concreto. Trabajar con José fue muy interesante. Él es un gran profesional y nos hizo sentir muy cómodos en todo momento. Llegamos a Sevilla con canciones muy machacadas previamente en casa y con patrones bastante claros (el caso de “Mapas Infinitos”, por ejemplo), pero hubo otras como “Coleccionistas” en las que la mano de José dejó huella y nos ayudó a acabar de definirla. El trabajo de José está muy presente en el sonido de este disco. Las voces fueron grabadas en dos tardes en Cherry Sounds Records por Cristóbal Romero, con el cual también estuvimos muy a gusto trabajando en esta grabación express.

Quería preguntaros también por la puesta en escena del directo. No sé si ese viraje a sonidos más electrónicos comportará cambios ahí. Como nunca os he visto en el directo, aprovecho para preguntaros por el directo. ¿Cómo os gusta articularlo? ¿Qué novedades traéis en el set?

El directo está formado por nosotros dos acompañados de las proyecciones de “La Casa junto al Mar”. Nuestro set se resume en guitarras y sintetizadores y para este nuevo disco sí que hemos tenido que adaptarnos un poco a los sonidos electrónicos, así que la guitarra no jugará un papel tan importante como en la presentación del primer album, pero sí que seguirá estando presente.

Y siguiendo un poco con eso, y casi para acabar. Saber cómo trabajáis internamente las canciones. ¿Es un proceso en el que participáis los dos?

María suele trabajar una idea principal, digamos el esqueleto de la canción, que se centra en una línea de voz-sintetizador/ voz-guitarra. Luego entra en juego Nacho para arreglarla y entre los dos terminan de vestirla. Respecto a las letras, María se encarga de escribirlas.

Recupera ‘El verano era ella’ en Bandcamp: