Heather, en una imagen promocional | Laura Fernández & Stefano Bona
Heather – Union (Famèlic Records, 2017)
La aparición y posterior evolución del grupo afincado en Barcelona Heather ha sido una de las noticias más felices por estos lares desde la salida de su homónima presentación en aquel 7», editado ya por entonces por Famèlic Records, sello que vuelve a apostar por el quinteto para la publicación de su disco de debut. Desde su puesta de largo en la primera Casa Gran organizada en Sala Apolo que Heather han dado la sensación de llevar mucho tiempo ahí, algo en cierto modo cierto si se revisa la extensa relación de proyectos y colaboradores que sus diferentes integrantes han llevado a cabo, muy bien explicada por cierto por Victor M. Hidalgo para Gent Normal.
Con todo ese bagaje previo llegaba a principios de mayo Union (Famèlic Records, 2017), trabajo que ha contado con la producción de Sergio Pérez de Svper, y que, tal y como nos explicaban algunos de sus protagonistas en 2.000 Enemigos Mortales, ha supuesto algo más que la suma de talentos reunidos en esta formación de largo recorrido, autores de uno de los trabajos esenciales de lo que llevamos de temporada musical. Que al disco llegan en plena madurez creativa es algo que se corrobora con el mimo que han presentado estas nueve canciones, con web incluida en la que han comisariado una interesante exposición digital integrada por el trabajo visual de 12 artistas, punto de partida además para el videoclip del single de presentación ‘Distance‘, disponible al inicio de la entrevista.
Presentado con honores en la Sala BeGood de Barcelona, Heather visitarán este fin de semana el norte de España con conciertos en Bilbao (día 9 junto a Yumi Yumi Hip Hop y C. Payne en la sala Shake) y Oviedo (día 10, con Losone y Yumi Yumi Hip Hop en la Lata de Zinc). La presentación en Valencia y Madrid queda para finales de mes, con citas en Magazine (23 de junio, junto a Nomembers y Ghost Transmission) y Madrid (día 24, con Lois en Costello).
Texto: R. IZQUIERDO | Fotografía: FAMÈLIC RECORDS
Siempre hemos querido buscar un choque de sonido entre las melodías pop, que flotan y predominan las canciones, con la agresividad que conforman las bases
Sois un grupo, además de músicos, de amigos muy vinculados a la escena underground de Barcelona y cercanías. En alguna entrevista ya habéis explicado como os conocisteis, así que más que por eso me gustaría preguntaros por los primeros ensayos. ¿Qué fue lo más emocionante de comprobar que la cosa podía funcionar? ¿Recordáis la primera canción de la que acabasteis totalmente contentos?
Nos es muy difícil quedar totalmente contentos de una canción pero “Transition” es la primera canción que compusimos y la única de esa época que ha sobrevivido hasta el disco. Suponemos que la mayoría de bandas pasan por un proceso parecido durante sus principios, pero nuestros primeros ensayos no estaban muy cargados de expectativas y quedábamos sin saber muy bien qué iba a salir de ello. Fue emocionante ver que al haber llevado muy pocos ensayos la cosa ya fluía y que teníamos algo que valía la pena entre las manos.
Todas esas sinergias confluyen en vuestro single Distance, acompañado por una exposición digital (nota: la exposición digital puede visionarse en la web oficial de la banda) que llevó al estreno del tema un punto más allá de los habituales estrenos. Someter a tantas reinterpretaciones a la misma canción imagino que ayuda a analizar la original, y a reflexionar sobre vuestro propio proceso creativo. ¿Qué es lo que más os ha aportado de esa manera de funcionar?
Claramente nos ha ayudado a crecer, nos ha hecho ver el proceso creativo desde nuevos ángulos, y ha hecho que no nos cerremos a ninguna idea. A parte, ver diferentes interpretaciones visuales de una canción nuestra ha sido realmente bonito y ha abierto una puerta a muchos artistas que respetamos para que entraran dentro de nuestro propio proceso creativo, creando un síntesis natural.
Cuando el año pasado entrevisté a Yago para el estreno de Límit Constant me explicó el mimo que habían puesto en el sentido estético del álbum. Tanto las fotos de prensa como el artwork, todo estaba relacionado. ¿Sentís esa misma necesidad? ¿Qué importancia le dais al soporte físico y al soporte visual que rodea vuestra obra?
Totalmente, es imposible disociar a una banda de su imagen, todo lo que la rodea o hace condiciona su visión. No es algo que venga de nuevo pero a día de hoy parece haber ganado una mayor relevancia.
El otro día en 2.000 Enemigos nos contasteis que el disco lo grabasteis hace casi un año. ¿Por qué se demoró la edición? ¿Qué ha estado haciendo Heather como banda todo este tiempo?
No cambiaríamos el viaje que hemos hecho para nada, el proceso de mezcla fue largo hasta conseguir el sonido que queríamos, pero todo lo aprendido nos ha hecho definir el camino que queríamos seguir y esto lleva tiempo. También trabajamos mucho en el diseño del disco, de la web y la exposición colectiva por lo que realmente no hemos parado quietos.
El LP ha aparecido dos años después del disco, lo que no es tanto si consideramos que entremedio habéis invertido mucho en tocar y daros a conocer. ¿Qué balance hacéis de este primer tramo vital?
El balance es positivo viendo a donde nos ha traído.
Vuestro primer bolo fue en La Casa Gran, concierto organizado por la gente de Famèlic, con participación en aquella edición de muchos grupos de L’Hoteler.
Si, fue muy bonito poder darnos a conocer rodeados de amigos.
Salvo Heather Cameron el resto venís de varios grupos. ¿Hasta qué punto quisisteis extrapolar la manera de funcionar de vuestros antiguos proyectos aquí? ¿Cuál es la hoja de ruta innegociable del proyecto?
Heather ha sido algo nuevo para todos, cada uno ha tenido que desaprender mucho de lo adquirido en anteriores proyectos para poder crecer juntos, al final somos cinco personalidades muy fuertes que han tenido que aprender a trabajar como una. Y después de todo el camino tenemos claro que “Union” es el principio, las bases sobre las que queremos desarrollarnos y seguir creciendo como músicos.
Quería preguntaros por el hecho de editar en Famèlic, con quienes ya lanzasteis vuestra primera referencia. Desde fuera da la sensación de que sois un grupo de amigos editando con amigos. El hecho de que os conozcáis tanto, ¿ha hecho que llegaseis al primer disco con mucho hecho?
Famèlic nos ha acompañado desde los primeros días de este proyecto y trabajar con ellos es algo que surgió de una forma completamente orgánica y natural. Les consideramos hermanos y el hecho de que nos hayan acompañado siempre con amor y ilusión es algo que hace que la banda se sienta cómoda y contenta con lo que hemos ido trabajando. Durante el proceso del LP han confiado 100% en nosotros y hemos sentido apoyado intrínsecamente durante todo momento.
Union simboliza todo aquello que conforma Heather, todo aquello a lo que hemos renunciado cada uno y todo lo que hemos ganado
Union es un título bastante simbólico y no sé hasta qué punto metafórico de vuestro trabajo en común. A la hora de fijar vuestro sonido, ¿qué peso jugó vuestro rol en formaciones previas?.
Union simboliza todo aquello que conforma Heather, todo aquello a lo que hemos renunciado cada uno y todo lo que hemos ganado. Nuestros roles en la banda son los mismos que en formaciones anteriores y eso ha jugado un peso importante a la hora de posicionarnos a nivel compositivo y sonoro, dándonos las herramientas para adaptarnos y jugar con la visión de los demás. Siempre hemos querido buscar un choque de sonido entre las melodías Pop, que flotan y predominan las canciones, con la agresividad que conforman las bases. Teniendo claro que aporta cada uno de nosotros al conjunto con tal de equilibrar la balanza entre los dos mundos. Cuando escuchamos el disco mezclado y casi acabado nos dimos cuenta de que estas dualidades se habían fusionado tal como habíamos visionado, formando una unión coherente. Más allá del LP, esa idea de Union vuelve a subrayar la importancia que damos a la colaboración entre la banda y entidades externas, esto disco es nuestro y es de todos.
Siguiendo con eso, ¿ayudó que fuese por ejemplo el primer grupo de Heather?
Que fuera el primer grupo de Heather no influyó mucho a ese nivel, sino más la fuerza que ha ido ganando su voz con el tiempo.
La producción corrió a cargo de Sergio Pérez de SVPER. ¿Cómo fue el trabajo con él? ¿Llegasteis con las canciones totalmente cerradas?
El trabajo con Sergio fue muy fácil, su trabajo como productor nos ayudó mucho a cerrar el disco. Dejamos algunas cosas para el estudio como “Consent”, el tema instrumental que hicimos por completo ahí cosa que nos mantuvo abiertos a cambios que se pudieran surgir allí en el estudio con Sergio al mando.
Sergio también produjo lo último de Univers, donde Heather colaboró en una canción. Leí en una reseña que el disco suena a “Slumberland Records”, cosa con la que podría estar de acuerdo. Más allá de referencias, ¿llegáis al sonido a través de una búsqueda consciente?
Si, es algo a lo que hemos prestado muchísima atención en la grabación del LP. El proceso de grabación de nuestra primera referencia, el single Inside/Run, fue algo diferente, algo más rudimentario, así que hemos disfrutado mucho del proceso de grabar con las ideas claras.
Que el disco lo presentéis con Anarquía Vertical y Futura, ¿es una declaración de intenciones a la hora de hablar del circuito por el que os gustaría mover el disco?
La presentación ha sido una fiesta con nuestros amigos y bandas que nos gustan, y porqué no una oportunidad para mezclar escenas con las que nos sentimos vinculados y con quien compartimos las ganas por mezclarlas más.
Siguiendo un poco con eso, quería preguntaros por vuestra ‘militancia’. El hecho de haber estado tan involucrados en la escena local imagino que os da una visión muy particular de lo que se cuece por aquí
Barcelona es una ciudad bastante interesante a nivel musical, cuesta pensar en lugares con una variedad tan amplia de estilos y de un nivel tan alto. Al mismo tiempo puede que estemos en un momento de impás, en que el impacto de estas bandas ya no es el que era, quizá porque ya somos todos “mayores” y no vemos una base joven detrás, lo cual pone en evidencia que en realidad nuestra generación es la que ha venido a remolque de la anterior y estemos viviendo un fin de ciclo. En un momento en que ya solo ves caras conocidas entre públicos cada vez más difíciles la segmentación por escenas pierde cada vez más sentido y es justamente la mezcla lo que puede hacer surgir nuevas propuestas.