“Dos tipos con barba, un montón de cacharros electrónicos y dos guitarras en el escenario”, así es como Esteban Ruíz y José A. Pérez se definen. I Am Dive no es exactamente una banda de rock, al menos no una normal. La electrónica y un sinfín de loops de voces e instrumentos alimentan una voz y una guitarra acústica deseosas de pisar terrenos pseudo-bailables y crear así melodías desgarradoras e hipnóticas. Por IRENE MASOT.
Apenas ha pasado un año y medio desde que estos andaluces grabasen su primer EP Fall EP y diesen su primer concierto. A día de hoy, su directo está más que consolidado. Así lo pudimos comprobar unos pocos afortunados el pasado 16 de febrero en Razzmatazz, cuando I Am Dive telonearon a los enormes Active Child. Sin duda alguna, aquello fue algo cósmico.
Pese a su esqueleto folk, I Am Dive evolucionan y siguen su curso natural, introduciendo en cada uno de sus temas una electrónica muy personal, con atmósferas muy densas y algo fantasmales, toques nórdicos y voces lejanas. Entre sus influencias se dejan caer nombres como el de Neil Young, Sigur Ròs, Bon Iver o José González, con todo lo bueno y lo malo que las comparaciones suponen.
Ganadores, junto a All la glory, del Circuito Joven Pop-Rock de Andalucía, iniciativa que premia la creación joven y el arte en la comunidad andaluza, I Am Dive son una banda de rock exigente y detallista. “Cada vez aprendemos más sobre cómo queremos sonar y cómo no, y pese a que estamos lejos de Madrid y Barcelona, las ciudades en las que se mueven los hilos, por otro lado, es solo cuestión de atreverse y de perseverar. Solo hay que trabajar siempre que tengas algo que ofrecer”, confiesan.
En 2011, no pudieron empezar de mejor manera que dando a luz a Fall EP, una pieza autoeditada por su su propio sello discográfico, We Are Wolves Records, y grabado por ellos mismos en un pequeño estudio doméstico. Meses después, Wish Death To Everyone EP vió la luz con el sello barcelonés Death to Everyone. Fue a partir de aquí cuando empezaron sus apariciones en el FIB, Mirador Pop, BurroRock y MonkeyWeek, seguido por una gira por España y Francia y culminando el año fichando por el sello Foehn Records.
A principios de 2012, apareció Constellations EP y con él una serie de canciones que estoy segura acompañaran a la banda hasta el final de sus días. Melodías como las de I was sad so I was dancing, lamentos de una guitarra que nos atrapan en delays infinitos o A morning walk, una canción perfecta para acompañar precisamente eso, un paseo matutino bajo la luz de un sol que aparicia tímidamente nuestros pálidos rostros. Una maravilla.
I Am Dive, de la mano de Foehn Records, esperan sacar su primer disco Ghost Woods en abril y contará, casi seguro, con diez canciones.
[youtube id=»qN0yt2zm-lE» width=»600″ height=»350″]