El pasado mes de Marzo Wild Belle lanzaban su primer álbum, un trabajo con el que pretendían alargar la buena estrella de su EP de debut, algo logrado en parte por un álbum que quizá no trascenderá como su mejor obra pero que aparece como una sugerente carta de presentación. Por ART VANDELAY
- Meses después de su hit It’s Too Late Wild Belle vuelven a la carga con su primer disco de estudio
- Tras tocar en el pasado festival de Coachella están confirmados para el Lollapalooza de su Chicago natal
Imagen promocional de Wild Belle
Aún no hay fechas por aquí para disfrutar el directo de Wild Belle en primera persona, pero su incursión en el Lollapalooza de Chicago o su reciente paso por Coachella nos sirve para recuperar su excelente Isles, disco de debut publicado hace unas semanas que les sirvió como aval a la hora de presentarse a nivel internacional, una presentación que venía de serie tras el relativo pelotazo que dieron el año pasado con It’s too late, seguramente su tema más accesible, encargada de tender puentes entre crítica y público prácticamente desde el inicio.
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El proyecto está formado por los hermanos Bergman. Elliot y Natalie tenían experiencia musical previa en otras formaciones, aunque éste es su proyecto más ambicioso hasta el momento -Natalie, por ejemplo, era corista en Nomo, formación en la que Elliot sí desarrollaba un papel principal, asumiendo aquí un protagonismo mucho mayor, que está dispuesta a aprovechar-.
A medida que su presencia en Nomo -formación que alternaba sonidos jazzísticos y africanos, algo a lo que no escapa Wild Belle– como corista se le fue quedando pequeña, Natalie y Elliot decidieron embarcarse en Wild Belle, ecléctico proyecto que recoge varias etiquetas, dando como resultado un collage colorista, con cierto toque hippie -especialmente en sus videoclips- y ofreciendo sobre todo la posibilidad de disfrutar de la voz de Natalie, comparada en algunos ámbitos con algunas de las últimas grandes voces mediáticas. El rol de Elliot como multiinstrumentalista no queda en ningún caso eclipsado por el buen hacer de su hermano, planteando un disco de evidente función lúdica, que cumple con su cometido de llevar un poco más allá lo exhibido en su EP de presentación.
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Como decíamos, las expectativas de cara a este primer LP eran elevadas. Por ello, tras presentar en 2012 el EP It’s Too Late, el pasado mes de Marzo se lanzaban con el primer largo, disco que incluye los temas recogidos en el EP -It’s too late sigue siendo de hecho su temas más reconocible- por más que el single lanzado a modo de presentación ahora sea Keep you. El disco logra superar el reto planteado de entrada, comprobar si había más tela que cortar que la presentada en la primera aproximación y reafirmar algunas de las señas de identidad asumidas entonces, como la comentada facilidad para alternar estilos y la capacidad para aunar diferentes capas de público, trufando de temas amables un disco muy apto para estas fechas, con algunas cosas aún por aportar -que éste no sea un disco perfecto no es algo necesariamente malo-y unas sensaciones óptimas que van más allá de sus dos temas más conocidos.
En Lollapalooza, donde jugarán en casa ya que son de Chicago, se podrán disfrutar algunos de los hits de la banda, como el animadísimo Shine o la más reggae Love like this, reafirmando un sentido ecléctico también presente en June, conducido casi siempre por Natalie, con la excepción de When it’s over, único tema del álbum donde el protagonismo vocal recae en Elliot. Con todo, el álbum confirma el carisma vocal de Natalie y apuntala lo sugerido en su trabajo anterior, cuando empezaron a dejar claro que lo suyo son los sonidos primaverales con ecos de verano. Ya queda menos.
Escucha Isles, el primer disco de Wild Belle, en Spotify: